Oneo

Capítulo 2

Me termino la tostada y bebo deprisa el café, aunque mi garganta me hace arrepentirme al notar que aún estaba algo caliente para mi gusto.

Salgo disparada de la silla en busca del móvil, y en cuanto lo tengo entre mis manos marco el nombre de Arriane en la agenda y le doy al icono de llamada.

Escucho un gruñido cuando descuelga la llamada, esto huele a mala uva.

-Seas quién seas, voy a encontrarte, y te demostraré porqué no se debe despertar a Arriane un sábado a las... -Hace una pausa. 

Supongo que estará moviendo la mano por la mesita de noche en busca del reloj y suelto una carcajada al imaginar sus movimientos inútiles.

-Son las 9:30, así que mueve el culo hasta mi casa. Me ha llegado una petición de amistad de desesperadosatuservicio.com y creo que tienes que verlo en persona.

-Oh, ¡Dime que te ha agregado un friki gracioso! -Dice con ilusión mientras yo ruedo los ojos.

-Sí, tu ex... -Contesto rápidamente entre risas y la escucho insultarme al otro lado del móvil.

-Deja de recordarme a mis errores... Y era un friki mono, no gracioso. -Responde a la defensiva.

-Cierto, que la gracia la tenía en... -Oigo como me manda callar mientras se ríe.

-Ordena tu pocilga, en 15 minutos estoy ahí.

Dicho eso cuelga, y yo giro sobre mis talones mirando el desorden del salón mientras suelto un suspiro.

***

Estoy colocando el último cojín del sofá, cuando escucho el timbre.

Abro la puerta y me encuentro a Arriane, la cual me mira sonriente.  

La veo venir...

-Buenos días, Miss Pelos. En el catálogo de esta semana tenemos en oferta una plancha que...

-Agh, cállate. -Le dejo la frase a medias mientras nos abrazamos riendo.

Entra a casa sin dejar de abrazarme y cierra la puerta con la cadera.

-Vamos, enséñame esa superhipermegaultrapetición de amistad. -Pronuncia el trabalenguas y se deja caer en el sofá.

Me siento a su lado, pero dándole la espalda, con el portátil y un peine en mano.

Le ofrezco el peine y abro el correo mientras me desenreda el pelo.

Levanto un poco el portátil para que mire la foto del perfil por encima de mi hombro y noto un tirón de pelo.

-¡La madre que te..! -Refunfuño llevando mi cabeza detrás del peine para evitar el mayor dolor posible.

-¡PARIÓ! -Termina la frase por mí en un grito.- ¡YO TAMBIÉN QUIERO UNA CUENTA EN LA PÁGINA ESA!

Le dejo mi pórtatil en las piernas y le arranco el peine de las manos para no sufrir más.

Me río al verla con los ojos como platos, supongo que esa era mi cara ayer cuando vi la foto.

-¿Sabes que mi portátil no es comestible? -Me carcajeo mientras termino de peinarme.

-Pagaría para que lo fuera... -Murmura embobada y me mira riéndose.

***

-¡Vamos, acepta ya la petición! -Insiste Arriane.