Mi Prometida

Parte 8

- No debiste decir eso Donghae. - Claudia y él iban en la parte trasera del auto que el chófer de su padre conducía.
- Bueno, recordé que en la universidad fingía ser tu novio para que alguien dejara de acosarte. Creía que este era el caso.

El rostro de Claudia se contrarió. Claro que quería desilusionar a Siwon ¿O no? Pero le dolía, sabía que había perdido cualquier oportunidad con él.

Donghae vio como la mirada de Claudia se perdió en el vacío.

Aún que ella fingiera no conocerlo, él no podía dejar de recordarla y ahora al verla entrar a la fiesta del brazo del tal Donghae hizo que los intestinos se le retorcieron. Lo trataba del mismo modo que lo había tratado a él
Esa mujer lo había hecho sentir como si fuera el único hombre sobre la tierra y el se lo había creído, del mismo modo en que ese pobre idiota se lo estaba creyendo.

Sí, el tal Donghae se iba a encontrar con una sorpresa al final cuando Claudia, luego de jugar con él, no le diera nada. O tal vez a él si decida dárselo.
¡Maldición!
Tuvo que dejar su copa de champagne en una mesa por que temió romperla por lo furioso que se puso ante esa idea.

Era por eso que no se había acostado con él.
¿Se había acordado de su novio que había dejado en Londres y se había arrepentido de serle infiel?

Los vió salir a la terraza del edificio.

Cruzó todo el salón para ir tras ellos. Un par de mujeres le sonrieron pero no estaba de humor para coquetear con ellas. Desde que conoció a Claudia no le había vuelto a interesar ninguna mujer. No había podido controlarse, lo había embrujado por completo y no iba a permitir que nadie más se quedará con ella.

Un aire fresco le golpeó la cara. No escuchó ni vio nada hasta que dió unos pasos más. Allí estaba ella, recargada del hombro de ese hombre y él recargaba su cabeza en la de ella. Él tipo bajo el rostro, parecía tener la firme intención de besarla, eso no lo permitiría.
En un abrir y cerrar de ojos había agarrado a Donghae por el pecho empujándolo con fuerza ante la mirada atónita de Claudia.

- ¡No te atrevas a tocarla!

Claudia corrió al lado de Donghae, preocupada se arrodilló a su lado.
- ¿Estás bien?

Claro que estaba bien. Solo tenía el orgullo herido.
Ambos hombres se miraban con fiereza.
Claudia se apartó de su lado y encaró a Siwon.
- ¿Que esta mal contigo? ¿Como te atreves hacer algo así?

La conmoción llamó la atención de la gente que está cerca de la terraza y miradas curiosas comenzaron a aparecer.

Donghae se levantó furioso listo para defenderse de la agresión, pero Claudia estaba en el camino mirando furiosa a Siwon.
- Contesta, ¿Qué diablos estas haciendo? -ya no se dirigía él con honoríficos ni respeto.
- ¿Disculpa? ¡Me parece que esa pregunta te la tendría que hacer yo a tí!- contestó Siwon -¿Qué demonios estás haciendo?
- Yo solo estaba. . . ¡Yo no tengo por qué darte explicaciones de lo que yo haga!
- ¿Ah, no?
- ¡Claro que no!- Claudia dió un taconazo en el suelo para demostrar su enfado.
- Tal vez querrás explicarle a tu prometido por que tengo yo esto.- metió la mano al bolsillo de su pantalón y saco la prenda íntima, mostrándosela en el puño.

Por instinto quiso arrebatarsela pero él fue más rápido y cerro el puño con fuerza volviendo a introducir la prenda en su bolsillo.

- ¿¡Como te atreves!? - dijo Claudia escandalizada, confundida y apenas podía hablar y pensar con claridad.
- ¿Como me atrevo a que? Es solo para recordarte que tenemos un asunto pendiente.
- Nosotros no tenemos nada pendiente.- y para demostrárselo giró sobre sus talones y comenzó a salir del lugar llena de vergüenza, seguida por Donghae.

Pero Siwon no estaba dispuesto a dejarlas cosas así. La tomo del brazo y la giró hacia él.

Claudia se estrelló contra su pecho fuerte y tibio, mirando a sus maravillosos ojos oscuros como un abismo. Un extraño calor le recorrió el cuerpo al recordarlo desnudo sobre ella.
- No vas a ninguna parte
- No tengo nada que decirte y no me interesa nada de lo que tú tengas que decirme.
- Se razonable.

¿Ser razonable? Si hace un momento se había atrevido a chantajearla con. . .
- ¿Como te atreves a decirme que sea razonable cuando te atreviste a mostrarme. . . Lo que olvide en tu casa? Eres un rastrero.

Eso último provocó su indignación.
- No lo soy.
- ¡Si!
- Entonces eres exactamente igual que yo.
-¿Qué?
- ¿Quieres que te recuerde lo que sucedió la otra noche delante de tu prometido? Si yo soy rastrero tú eres igual por que recuerdo que no te importo tu novio en ese momento.
- ¡Eres un cretino! ¡Suéltame! De lo que pasó esa noche ahora me arrepiento. ¡Para que te enteres, no quería nada contigo!
- ¡No era eso lo que decías esa noche en mi cama! - replicó furioso- ¡Entonces decías que me deseabas!

Claudia forcejeo para librarse de sus brazos y miró a Donghae que levantó una de sus cejas totalmente sorprendido. Pudo ver la decepción en su rostro cuando se acercó a ella y tomándola de la mano la saco de allí.

Aquello era una maldita pesadilla. Es que no podía ser cierto. Estaba soñando, eso era seguro. Debió dormirse en el auto de camino a la fiesta de lanzamiento y todo lo que acaba de pasar era una pesadilla.

Pero no era así, el silencio entre ella y Donghae, en el reducido espacio del auto le corroboraba que no era así. Claudia se giró a mirarlo y se dió cuenta de que en los ojos de su amigo había varias preguntas que exigían respuesta.

- Claudia. . .

¿Qué podía decirle? Si Siwon tenía las pruebas de lo que decía.

- Lo que dijo Siwon es cierto- lo admitió- pero no pasó nada de lo que puedas imaginarte.
- ¿Ah, no? -Donghae jamás la había mirado del modo en que ahora lo hacía. Totalmente desilusionado.
- Yo. . . Siento desilusionarte. No debía acceder a ese juego.
- ¿Un juego?
- Si, uno que salió terriblemente mal. Recargo la cabeza en el hombro de su amigo y este acarició sus cabeza.
- Ahora el tiene una imagen terrible de mi.
- y yo vine a estropear todo.
- No, no.  Yo estoy agradecida de que estés aquí.
—¿Que fue lo que pasó entonces? ¿Porque ese hombre parece tan herido? ¿Que fue lo que le hiciste?

¿Que fue lo que le hice?

La pregunta retumbó en su cabeza.