Full Moon

capitulo 3

Capitulo 3

Estoy en uno de los sofás de la sala con una copa de vino en las manos, miro a la ventana y el cielo esta oscureciéndose, mis manos tiemblan, aparece Louis con un sobre en las manos me lo entrega y regresa por donde vino. Abro el sobre y veo una letra legible, una invitación.

Baile de bienvenida.

Esperamos y puedas asistir al baile de mascaras

Está noche en la mansión de Lord León.

A las 9:00 pm.

El baile de masacras comenzara a las 9:00 pm en punto,

Se ruega a los invitados estar en la sala en ese

Momento.

Pd: Los participantes deberán llevar solo puesta la máscara y los pantalones,

Acompañados de su respectivo amo.

Examino el sobre y tiene un leve aroma a jazmín, giro la carta y veo: Bennett, Stump.

Giro sobre los hombros y me doy cuenta de que estoy solo en la mansión, pero ni siquiera tengo ropa aquí, voy a mi habitación, y al entrar veo sobre la cama unos pantalones negros, en el piso un par de zapatos brillantes.

De pronto me acerco a la cama y veo una máscara negra con cintas a los lados, me siento en la cama y examino mi antifaz con los pulgares.

Ya son las 8:35 pm, el cielo ya está oscuro, voy al baño y lleno la tina de agua cálida, me sumerjo en ella, y me dejo llevar por la dulce sensación.

Cuando estoy bajo el agua con los ojos cerrados, escucho un ruido, de pronto abro los ojos y veo a Andrés mirándome desde arriba, entro en pánico y trato de salir de la bañera, pero este me sujeta del cuello, doy patadas y muevo los brazos con fuerza, pero es imposible, siento como el agua inunda mi interior, tengo miedo, pero lo único que hago es luchar por salir de allí, Oh Santo cielo, creo voy a ahogarme, pero ¿acaso eso será posible?

Vuelvo a cerrar los ojos, y la presión sobre mi cuello desaparece, abro lentamente los ojos y Andrés ha desaparecido, no lo veo por aquí, salgo del agua retomando el aire, mis ojos me arden, salgo de la bañera, me miro al espejo y veo el color rojo de mi cuello, salto del susto y me examino con cuidado, veo el vapor detrás de mí, examino el lugar y nadie está aquí, vuelvo al espejo y me miro nuevamente, tratando de ocultar mis quemaduras.

Al regresar a la habitación, veo a Caliel sentado cerca de la ventana. Gira hacia mí, y abre completamente los ojos.

― ¿Qué te paso?― Inquiere levantándose de su asiento caminando en mi dirección.

―An…

― Ese bastardo― Gruñe. Me toma del cuello como lo había hecho Andrés y siento un alivio de aquella sensación de ardor.

― Estas listo― murmura.

Miro al espejo que cuelga de la pared, y es así, mi cuello ha recuperado su color normal. Giro y voy corriendo en dirección a Caliel, y lo tumbo al suelo.

―Gracias― Balbuceo.

― Es un placer― me dice con  sus labios casi pegados a los míos, siento sus manos aferrarse a mi cintura.

―Mmm… espero no interrumpir― escucho a Joe murmurar.

― ¿Todavia estas en ropa interior? ― inquiere arqueando una ceja.

― Es que…―

―Ven aquí― me ordena con una cara de poco amigos, va hasta la cama, agarra los pantalones y baja hasta mis pies.