-- ¡Vamos! tienes que aceptar bonito.
-- Hyung, tengo clases y usted también, adiós.
-- Estamos libre. Es la merienda.
-- Tengo una clase con la comida, la comida es primero, Yoongi hyung.
El pequeño pelinegro iba caminando con su pequeño bolso y una sonrisa burlesca, detrás de él iba su hyung pálido con la mirada fija en su cuerpo.
Llegaron a lo que es la cafetería y prácticamente el menor de los dos se fue a sentar a la mesa del centro. Una vez sentado sus amigos fueron llegando y unas sonrisas igual de burlesca por lo desesperado que se encontraba el pálido.
-- Enserio, solo es un cita va ser muy pequeña, así de chiquita ―encoge sus dedo― las vas a pasar bien, te lo juro.
-- Pero yo no quiero, usted debe estar mintiendo.
-- Puedo mentir, pero a ti jamás. Te lo voy a demostrar.
-- ¿Y cómo? hyu- ¡no, qué hace!
Lo próximo que se vio fue como este se subía encima de la mesa a pegar cuatro gritos al cielo: -- Tú, Park Jimin ―señala― ¿me permites tener una cita contigo?
Con todo el esfuerzo posible se levanto de su banca y dictó un: -- No. Eres un hyung muy necio, baja de ahí.
Ahora lo que abundaban en aquellas paredes eran risas ahogadas, excepto por sus amigos.
Bajó rápidamente y se apoyó en la mesa apretando sus manos hasta que sus nudillos se tornaron muy blancos con un toque rojo, sus labios eran aprisionados por sus dientes, con su cabeza cabizbaja, se sentía frustrado. Sintió un movimiento de su cabello y levantó su mirada, notando como la persona quien lo acaba de rechazar le sonreía.
-- ¿No te gusto, Jiminnie?
-- Sí me gustas mucho, Yoongi hyung~
-- ¡¿Y porqué carajos te niegas a salir conmigo?!
-- No quiero que sea así de fácil. Pero igual hyung, tienes tu puesto conmigo asegurado.
Tal vez fue un poco de alivio el que dijera eso, aunque no iba a dejarlo ir sin, por lo menos, un beso: -- Vas a tener una puta cita conmigo, vas a ser mi jodido novio y nos vamos a casar y vamos a tener nuestra puta luna de miel, cachetes.
-- ¿Qué? ―con los labios entreabiertos soltó una sonora carcajada― eres muy lindo, hyung.
-- ¿Puedo darte un beso?
-- No.
-- Mierda ―gruñe―
Con lentitud se acercó al más alto quien destilaba humo y en cualquier momento iba golpear a quién sea, lo abrazó colocando su mentón en el hombro izquierdo.
-- Eres un hyung necio y lindo ―una tierna lamida y mordida fue dada en el lóbulo de la oreja― lo quiero, Yoonie~
Como los rayos del sol iluminaban tus días, las estrellas te alumbraban tus caminos, las aguas te bañaban de paz, los vientos te daban respiraciones tranquilas y como cachetes hacía dejar una gran sonrisa tonta en Min gatito Yoongi.
-- ¡TE AMO! PLANEA LA BODA AHORA, SEOKJIN. NOS CASAREMOS MAÑANA POR LA MAÑANA.
Porque Min Yoongi era el chico fumador y problemático de la universidad y Jimin -cachetes- solo era su más bella debilidad.
❝donde Jimin rechaza constantemente las citas y besos de Yoongi.❞
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Escrito [11/12/18]
Editado [01/04/19]dedicado a Tammy_momo
mere©
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de besos y citas | yoonmin
FanfictionJimin rechaza constantemente las citas y besos de Yoongi. ↯ Contenido Homosexual ↯ YoonGi: top! » JiMin: bottom! ↯ Fluff, soft, smut diabético y/o explícito. ↯ Estado: emisión ↯ Escritura: 111218 ↯ Estrictamente prohibida toda copia, adaptación, t...