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-- Dahyun se durmio ¿dónde dormirá?

-- En la vieja habitación de Jisoo. Esta limpia no te preocupes.

-- Esta bien. ¿Hyung dónde vas?

-- Traeré algo de la cocina ve tu a dejar a nuestra hija ―dicho eso el pelirubio salió corriendo por su travesura riendo en su huída―

-- Hyung tonto.

En su camino a la habitación llevó consigo su mochila donde traía el dulce. Abrió la puerta color crema con diseños negros adentrándose a está logrando dejar el pesado y blanquecino cuerpo pequeño sobre la cama donde se encontraban dos peluches y dos almohadas.

Rodeo su cuerpo con las almohadas y peluches abrigandola. Era una hermosa protección, a Jimin le encantaba esa sensación.

Se dirigió rápido al cuarto de Yoongi observando su oscuro cuarto. Llegó hasta al armario desvistiendose quedando en ropa interior sacando del armario una de las remeras manga larga favorita de Yoongi colocandosela.

Encendió el aire acondicionado recostandose en la cama sacando de su mochila el paquete de dulce pepero. Lanzando su mochila fuera, se acostó esperando a su hyung.

Le prometió una recompensa y él se la daría. Ninguno perdía.

-- Cachetitos.. ¿estas dormido?

-- Hyung.. uhm aún no te estaba esperando.

-- Sólo déjame sacar unas sábanas para colocarla en el piso.

-- ¿Qué? ¡no! ven aquí. Conmigo dormirás.

-- Si tú insistes ―dijo provocando risas entre ellos, se acomodó en la superficie suave de cama atrayendo el bonito cuerpo de su nene― ¿porqué esperabas?

-- Juguemos hyung~

-- ¿A qué? dime.

-- Peperos.

-- Acuestate sobre mí cachetes.

Obedeciendo colocó la mitad de su cuerpo encima de su mayor subiendo su pierna izquierda al abdomen contrario. Con sus habilidosas manos pudo colocar un pepero en sus labios juntandose con los labios de Yoongi mordiendo de a poco mientras se miraban, la tensión era palpable.

Quedó un pedacito del pepero agarrando este mismo y dejarlo en la mesita que estaba a la par.

Las mejillas de ambos de encontraban ruborizadas y su respiraciones se mezclaban, necesitaban besarse y Jimin luchaba contra ello.

-- ¿Te has dado cuenta que esto es una cita? ―susurro grave― ¿lo has notado?

-- No lo es hyung.

-- ¿Puedo?

-- Kitten.. uhm hazlo bebé.

Yoongi sonrió no aprovecharía esa respuesta más de la cuenta. Paso su brazo derecho por las caderas contrarias sonriendo al sentir como su cheeks se aferraba a él.

Sólo eso bastó para sentir los labios suaves y llenos del dulce que acaban de comer, abrió un poco estos encajandolos haciendo un leve movimiento. Se separaron un poco y un besito más fue añadido.

-- H-hyung.. caí ―oculto su rostro en el agitado pecho pálido―

-- Prometo hacer que no paso nada y fue un sueño, mira el lado bueno no fue una cita ¿te lo pedí?

-- N-no.

-- Entonces no cuenta cachetitos.

-- Te quiero mucho hyung~ muchito.

-- Yo igual o más bonito. ¿Más peperos?

-- Sí, sí, sí.

Yoongi estaba muy confiado en que habrían más besitos, pero Jimin quería seguir jugando y más tensión no hacía mal a nadie.








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Escrito [29/03/18]
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me quedé sin ideas):
mere©

de besos y citas  |   yoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora