Montaraz

Elegantemente tarde

Razven,Fargo,Tauron y Baby face,junto con Celeste fueron elegidos por el rey de Costa Luna para formar parte de la escolta personal en tierra de la princesa Alissa durante su estancia en Costa Estrella. El resto de los montaraz elegidos para esta misión formarían parte de la tripulación del yate en el que viajarían por "capricho" (según las palabras del rey) de la princesa. La razón de este capricho era muy simple: Alissa trataba de retrasar su llegada a Costa Estrella el mayor tiempo posible.

Razven y los otros estaban repasando el plan cuando Celeste y la princesa entraron al camarote que adaptaron como salón de guerra.

— ¿Está todo listo? El capitán dice que en media hora estaremos atracando en el puerto, justo ahora estamos terminando de cruzar el estrecho de Florian — anunció Celeste nada más cruzar la puerta.

Los cuatro hombres levantaron la vista de los planos a los que estaban echando un último vistazo y se quedaron pasmados nada más verlas:

La princesa Alissa vestía un hermoso vestido rosa pálido,la doncella que la acompañaba recogió su cabello rubio en un alto y elaborado  peinado, con un maquillaje glamuroso resaltó la belleza de sus facciones.

Por otro lado,Celeste. Ella llevaba un vestido verde esmeralda que hacía refulgir su cabellera rojiza cual fuego sagrado,casi nunca utilizaba maquillaje y el kohel en su pestañas realzaba el verde de sus ojos y los hacia ver más grandes,el tono durazno en sus mejillas perfilaba muy bien sus pómulos y el coral en su boca la convertía en una feme fatal. Los cuatro amigos no podían apartar sus ojos de ella.

— ¿¡Pero qué...!? — Fargo ni siquiera pudo terminar  una oración completa por mucho que lo intentó — ¿¡Qué hiciste...!? ¡Roja!

Estaban acostumbrados a su rostro al natural,el único maquillaje que la habían visto usar fue durante una de sus primeras misiones. Y nunca,ni siquiera en misión, la habían visto usar vestido.

— Perdón alteza,pero ¿¡QUÉ CARAJO LE HA HECHO A MÍ AMIGA!? — exageró Razven lo que todos estaban pensando.

La princesa Alissa sonrió satisfecha al ver el impacto que provocó la transformación de Celeste.

Al fondo del camarote, Tauron y Face observaban la escena desde el rincón, miraban a los montaraz acercarse y adular a su amiga.

— ¡Estas preciosa! — dijo Fargo.

— Alteza,debería visitarnos más seguido — bromeó Razven mientras hacia girar a Celeste.

Face contemplaba la escena en silencio sin poder apartar los ojos de Celeste sin percatarse de que él mismo estaba siendo observado por la princesa Alissa y Tauron. Este último, le dio un ligero golpe bajo la barbilla para que cerrara la boca.

— Cierra la boca Face se te va a caer la baba.

Face lo miró de tal forma,qué si las miradas mataran... 

— ¡Basta,ya! Dejen de estar jugando — protestó la montaraz — Mejor terminen de ponerse sus uniformes,no podemos cometer ningún error. Los montaraz no somos bienvenidos y estaremos en la boca del lobo la mayor parte del tiempo, recuerden;el rey Ashton es viejo,eso es verdad,pero no es estúpido, si no tenemos cuidado,no solo nosotros estaremos en peligro,Costa Luna será arrastrada con nuestros errores.

Los cuatro asintieron y terminaron de disfrazarse de escoltas con el uniforme militar de Costa Luna, una vez tuvieron todo en orden subieron a la proa para,presenciar la entrada al puerto. Celeste se removía incomoda junto a su prima, tenía tanto que no usaba un vestido que le provocaba comezón.

— ¡Ya! ¡Basta! ¡Deja de retorcerte como gusano! — la reprendió Alissa.

— No puedo,siento comezón en todo el cuerpo — decía mientras intentaba alcanzar su espalda.