Dirty Uncle. [Chriserick]

Capítulo 3.

Erick chilló cuando Christopher tocó uno de sus pezones.

- Por favor, tío.- Pidió con un hilo de voz. Quería llorar.- Basta, ésto está mal…

- Lo lamento, pero ya no… Ya no puedo detenerme. 

Y lo besó, con necesidad… Necesidad de querer sentirlo suyo. Erick intentó apartarse una vez más, renegando y no correspondiéndole el beso. Pero el castaño tenía más fuerza, y lo tomó de las mejillas, forcejeando con meter su lengua entre sus dientes para explorar cada centímetro cuadrado de su sabrosa boca. Erick lo empujó, esta vez con más fuerza y le dió una bofetada haciendo que la cara de Christopher se volteara y cayera al piso.

Corrió pero Christopher lo tomó por el tobillo, haciendo que se tropezara y cayera junto a él, golpeándose fuertemente el pecho. El pelinegro jadeó en busca de aire. Christopher se acerco a él, tomándolo de sus muñecas, para asegurarse de que no intentara escaparse de nuevo.

- No vuelvas a hacer eso o tendré que castigarte.- Hiso una pausa, para luego sonreír.- Otra vez.

- ¡Suéltame!.

- Mmh, no sabes cuanto me pone cuando te cabreas. - Gruñó.

Erick gimió cuando Christopher se colocó encima de él, aplastándo su pecho con la dura pared de su torso.

- Eso es, justo así Erick... Me encanta cuando gimes, y mucho mas si es mi nombre.

Erick abrió los ojos a tope, pero se sorprendió aun más cuando sintió que su pene respondía a sus palabras. Palpitaba de lo duro que estaba .

- Chris….-Gimió.

El castaño jadeó. Dios, como le gustaba oír su nombre desde sus labios. Era como si no tuviesen una relación de tío a sobrino, y eso lo excitaba aun más. Estaba empalmado, empalmadísimo. Y muy caliente. Su sobrino lo ponía a cien.

- No, tío, detente.- Suplicó cuando sintió las manos calientes de su tío correrle por sus muslos, hasta llegar nuevamente a su trasero. Tenía miedo, Dios. ¡Era su tío! No tendría sexo con él… ¿O sí?- Papá y Eleonora se enterarán, y luego….- Cortó la frase, imaginándose lo peor. ¿Qué pasaría sí su papá se llegara a enterar qué tendría sexo con Christopher? Probablemente los mataría a los dos.

- Shhh, tranquilo. Ellos están a cientos de kilómetros, no tienes de qué preocuparte.- Murmuró con la voz áspera.- Ésto queda entre nosotros dos… De tío a sobrino…