24 De Noviembre de 1991.
Jim camino de manera lenta por toda la casa, contemplado todo lo que había a su alrededor, el ambiente era lúgubre y se podía sentir una gran tristeza, nubes grises impedían la vista al cielo, el viento era frío y hasta parecía susurrar con melancolía y atraía a la pena.
Los gatos podían transmitir un gran sufrimiento, no se acercaban a él, solo lo miraban fijamente.
Llego hasta la puerta de la habitación donde estaba el amor de su vida y con cuidado la abrió evitando hacer algún ruido, dentro de aquella habitación amarilla, estaba Freddie, reposando sobre la cama, se notaba desgastado, cansado y enfermo, su rostro estaba pálido, su cabello había perdido su brillo y su cuerpo se encontraba excesivamente delgado.
Jim sintió un gran dolor al verlo así, su gran pesadilla se estaba cumpliendo, Freddie estaba muriendo.
Con cuidado se acercó a él y tomó su mano, estaba tibia, el menor sentía que al tocar a Freddie este se rompería.
Al tacto el mayor giró su cabeza hacia Jim y lo miró fijamente, en cuanto al menor traba de contener su llanto y frustración.
— Freddie –susurro, tratando de ser fuerte, pero simplemente no podía.
— No me mires así –susurro el mayor.
El menor solo bajo la cabeza.
— Jim, mírame, por favor –pidió el mayor y el menor solo obedeció– no quiero tristeza, no quiero pena, no quiero llantos, solo quiero disfrutar del tiempo que me quede en el mundo –dijo Freddie apretando la mano de Jim.
— Te amo, Freddie –susurro Jim.
— No hagas eso –suplico el mayor.
Jim lo miró sin entender.
— No digas eso como si nos estuviéramos despidiendo –dijo– sonríe para mí, quiero ver la sonrisa que tanto amo, quiero ver tus blancos dientes y los hoyuelos en tus mejillas –pidió.
Jim lo miró y acarició su mejilla, mientras trataba de sonreír.
Freddie sonrió.
— Dame un beso, por favor –suplico Freddie.
Jim se acercó al rostro de Freddie, rozo sus labios con los de él, después los unió completamente, aquel beso tenía un sabor salado, por las lágrimas del menor.
Al separarse Freddie solo suspiro y mantuvo sus ojos cerrados.
— No me sueltes –pidió apretando nuevamente la mano de Jim.
— Nunca –susurro.
Los minutos pasaban y la respiración de Freddie se fue calmando hasta volverse algo inexistente y su agarre se soltó.
En ese momento Jim rompió a llorar sobre el pecho de su pareja, mientras que acariciaba su rostro.
Las nubes empezaron a dejar caer la lluvia y los gatos maullaron de manera dolorosa como si comprendieran que Freddie nunca volvería a despertar.
-
13 de Diciembre de 1989.
Freddie veía como su pareja se movía en la camilla, preocupado tocó su rostro dándose cuenta de que su temperatura había aumentado.
Rápidamente salió de la habitación y pidió que alguien llamará al médico.
El volvió a con Jim y escucho como murmuraba cosas, entre ellas su nombre.
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Un Año Para Amar.
FanfictionUn año, solo un año, pero... ¿Qué se podía hacer en un año? ¿Qué puedes cambiar en un año? Muchas cosas podían se podían hacer, muchas se pueden cambiar, muchas se pueden reparar. [UNIVERSO ALTERNATIVO.] Se toman algunas cosas de la realidad y otras...