- ¡Vamos, Lottie, no te enfades conmigo! - reía un chico moreno hablando con su amiga.
- No es que me enfade, es que me parece raro. - contestaba la pelirroja entre risas.
- Fui a visitarla a la tienda, punto.
- Ya lo sé, Fred, pero nadie va a una tienda a visitar a una chica para ligar y se mete con ella en el probador.
- Lotte, no es tan raro. Pero eso ahora no importa, te veo después.
- Suerte, yo me voy a trabajar. Recuerda que vengo a buscarte. Y quizás te la hayas ligado, digo, la has traído por fin al concierto. - sonrió la chica pecosa saliendo del bar.
El concierto fue genial, Mary Austin animó mucho a los chicos y la gente disfrutó mucho. Los cuatro chicos salieron fuera, a la furgoneta de Roger y empezaron a hablar, Mary se quedó en el bar.
- ¡Mary! - llamó Charlotte - Vengo a por Freddie, si quieres te llevo a ti también.
- No hace falta, de todos modos hoy tengo que irme pronto. Pero gracias. - contestó la rubia sonriente.
- Mary, no te vayas. - dijo Fred entrando.
- Lo siento, tengo que irme en serio. - contestó Mary apenada.
- Pues te veo mañana, adiós. - se despidió Fred con un beso en la mejilla - Ven, Lottie, te voy a presentar a los chicos.
- No hace falta, de verdad, tenemos prisa. - insistía Charlotte siendo arrastrada por su amigo hacia afuera por la puerta trasera.
Cuando llegaron a la furgoneta los tres chicos sentados que conversaban cesaron la charla.
- Os quiero presentar a mi mejor amiga, y vecina de enfrente, desde los doce años. Bueno, Lotte tenía ocho años, pero era muy maja. - les dijo Freddie sonriendo. - Chicos, ella es Charlotte. Ellos son: John, - dijo señalando al que tenía el pelo más largo - Brian, - señaló al más alto y con el pelo rizado - y él es...
- Roger Taylor. - contestó Charlotte con una sonrisa sarcástica en la cara - No te veía desde el año sesenta y siete.
- Encantado de volver a verte, entonces, demonio pelirrojo. - contestó él de la misma forma.
- Espera, ¿os conocéis? - preguntó Freddie atónito.
- Salía con mi hermana hace tres años, el rubio bastardo ha comido en mi casa y todo. - contestó ella con sorna.
- Qué formal eras antes, ¿no? - preguntó Brian riendo.
- Fue cosa de mis padres, no es que al resto nos hiciera ilusión. - informó Charlotte riendo.
- ¡Qué raro! Esto merece ser comentado. - dijo Freddie ilusionado.
- Bueno, otro día charlamos, Freddie y yo nos vamos, que tenemos prisa. - dijo Charlotte.
ESTÁS LEYENDO
One Shots de la vida
RastgeleEs un libro en el que publicaré one shots de todo, ya sean fanfics o historias totalmente de mi autoría. Serán las típicas historias que se te ocurren y no sabes continuar, porque, bien o no tienen necesidad de ser continuadas, o bien porque no se t...