Eraser.

Capitulo 3.

Capítulo 3.
          
            "Reencuentro con el pasado"

No hay mucho que decir, hay cosas que por más que las evitas en algún momento van a suceder, sin importar donde te escondas, cuánto corras, cuánto lo esquives, si vas a estrellarte, lo harás.

No sabes con exactitud por qué, pero te encuentras estática intentando comprender por que llevaste tanto tiempo corriendo de algo que tarde o temprano iba a alcanzarte y asecharte por completo, a pesar de que tu mente no sepa del todo "Ese algo" sabes qué hay algo en ti que teme del futuro, teme de lo que estás a punto de encontrarte.

-Estas nerviosa?-Escuchas decir pero en realidad no tienes idea de cómo te sientes, tus manos están frías a pesar de que tu temperatura corporal siempre está ardiendo, miras fijamente ese mismo punto por lo que parece una eternidad.

-No lo se-Respondes, agarras una bocanada de aire sintiendo el frío de este resecar tu garganta

-No estaba enterado de esto- El chico dijo llamando la atención de ambas mujeres lobos- Debieron de haberme informado, tal vez podría haber abogado...- Pero el chico fue interrumpido por Lauren quien negaba con la cabeza

-Tenias una sola encomienda en todo esto y la has estado cumpliendo tal cual, gracias por cuidarla-Ella declaró acercándose al chico para luego envolverlo en un abrazo- Me alegra verte de nuevo, hermano-Sus ojos se cruzaron y la sonrisa del chico se ensanchó más en su rostro.

-A mi más- Ellos se abrazaron por un par de segundos más, familiarizándose uno con el otro de nueva cuenta.

-Es tan extraño esto-Lauren dijo riendo- En el buen sentido claro, verdad que es como una versión masculina mía?- Lucy ríe al ver la emoción en la chica y asintió con la cabeza

-Diego es más apuesto- Ella contestó juguetonamente haciendolos reír

-Siempre el hermano menor es una versión mejorada- Lauren respondió con orgullo- Me da tanto gusto habernos encontrado- Sus manos acariciaron su cara, siempre le pasaba eso cuando se reencontraban, habían sido pocas las ocaciones desde que se enteró Lauren que él estaba con vida, que él existía, que se veían, ya que no querían causar sospechas, pero cada que lo hacían, era la misma sensación de no creerlo, dada la historia detrás -Como está todo por allá?-

-Todo tranquilo, da un poco de miedo la forma en la que Gordon puede ocultar las cosas, si no me hubieran avisado de lo que estaba pasando nunca me hubiese enterado- Diego respondió, su voz llena de preocupación, Lauren le sonrió tratando de tranquilizarlo.

-No pasa nada, estoy segura que van a escucharnos- Diego asintió con la cabeza

-Le informé a Dinah al instante lo que me dijeron, ella probablemente ya les haya dejado saber el mensaje- Lauren buscó la mirada de Lucia la cual le regaló una sonrisa en respuesta

-Solo queda esperar entonces- La licántropo suspiró llevándose las manos a los bolsillos de su pantalón, hubo un breve silencio antes de que volviese a hablar

-Mmmh... Como... Cómo está ella?- La chica de ojos verdes preguntó un tanto vergonzosa, después de haberle pedido a su hermano estar pendiente de aquella castaña, la única regla que había puesto era no saber nada de ella o de sus hermanos, solo si Lauren preguntaba, cuando Lauren decidió jugársela de esa forma por Camila, no había sido algo que ella hubiera decidido al no haber sido por Dinah.

La pequeña bruja había cumplido su objetivo, ella la había encontrado, a pesar de toda probabilidad, lo hizo, fue un encuentro agridulce, pasó a los pocos meses de su desaparición, jamás dijo nada, ni a sus hermanos ni mucho menos a una Camila en un estado de locura, no quería alentar esperanzas sabiendo que quizás diga lo que le hubiera dicho a la chica, ella jamás regresaría y no se había equivocado, Dinah rogó, Dinah le aseguró que encontraría una forma de revertir esa maldicion, ella estaba segura que lo haría, tal y cual lo hizo al encontrarla, pero Lauren se negó, argumentando que esto era una señal para una segunda oportunidad, había encontrado su familia, había encontrado a su hermano, su tribu, el lugar donde pertenecía, no había forma de que desaprovecharía esa oportunidad, aún cuando su corazón perteneciera a otro lugar.