Un sueño de libertad.

Capítulo 6

Saihara besó al pequeño para después morder levemente su labio inferior haciendo que Ouma se quejara abriendo la boca. Saihara no dudó en meter su lengua, a Ouma esto le pareció algo asqueroso, nunca había leído algo como un beso con lengua, menos lo que hacía Saihara de casi meter su lengua en la garganta del pelimorado para después lamer los labios de Ouma y nuevamente meter su lengua jugando con la de este sin siquiera saber qué hacer, quería liberarse pero Saihara no soltaba sus manos, le estaba faltando el aire hasta que Saihara se separó dejando un hilo de saliva entre ambos labios.

Saihara: Fue genial...

Ouma: M-me estás lastimando la muñeca...

Saihara: Oh... Perdón... —Le soltó las manos. —

Ouma: F-fue demasiado raro.

Saihara: ¿Pero te gustó?

Ouma: N-no lo sé... No sé lo que está pasando... ¡¿Q-qué haces?!

Saihara: Solamente quiero ayudarte con tu problema. —Dijo acariciando el miembro del contrario por encima del pantalón negro que tenía puesto. —

Ouma: ¡N-no hagas eso...! ¡D-detente...!—Se intentó alejar pero Saihara le tomó la mano y con la otra siguió acariciando. Ouma se enojó tanto que le pegó en la cara. —

Saihara: ... —Se tocó la mejilla para después bajarle el pantalón a Ouma y la ropa interior empezando a masturbarlo.—

Ouma: N-no... A-ah~ m-mmm~—Se sostuvo de los hombros del contrario dándole débiles golpes una que la sensación hacía que su fuerza disminuyera y se sintiera atrapado en ella. —

Saihara continuó moviendo su mano de arriba  abajo sintiendo como el pre-semen salía. Ouma ya estaba a su límite pensando que se iba a orinar.

Ouma: S-Saihara-chan... D-de p-para... Para... N-no... ¡Aaaaahhhh!~—Se sostuvo fuertemente de Saihara sintiendo su primer orgasmo. Las lágrimas como la baba salían involuntariamente, en realidad su mente decía que todo eso estaba mal aunque su cuerpo parecía querer más, realmente estaba confundido y seguía teniendo miedo. —

Saihara: Vaya... Llevaste mi mano, siempre tenía la curiosidad de saber a qué sabía tu semen. —Lamió su mano que estaba llena de semen del contrario. —

Ouma: ¿Q-qué es eso...?–Dijo recuperando el aliento. —

Saihara: Es lo que sacas cuando te sientes muy bien.

Ouma: N-no... S-saihara-chan...

Saihara: Tranquilo, ya se sentirá mucho mejor. —Se desabrochó el pantalón para bajar su ropa interior casando su miembro que estaba más que erecto. —

Ouma: ¿A-ah...?—Se asustó por el tamaño, sobretodo cuando sacó algo de su bolsillo. —

Saihara había sacado lubricante, hace tiempo tenía pensado hacerlo con Kokichi pero con el sueño que tenía no podía ver el momento adecuado para hacerlo. Tomó la mano de Ouma para que no escapara y con la otra ya se había puesto el suficiente lubricante metiendo sus dedos en la virgen entrada del pequeño.

Ouma: ¡N-no...! D-duele...

Saihara: Después se sentirá bien... Lo prometo.

Saihara ya tenía tres dedos que metía y sacaba en la entrada, después de un rato ya Ouma soltaba gemidos de placer culposo.

Saihara volteó a Ouma poniéndolo en cuatro, este no dejaba de temblar, estaba muy asustado, cuando vio las intenciones de Saihara, no quería "eso" dentro de él, pensaba que seguro se rompería.

Ouma: S-saihara-chan... N-no... T-tengo miedo, no quiero morir...

Saihara: No morirás, estarás bien. —Lamió la espalda de Ouma para después frotar su miembro contra la entrada resbalosa por el lubricante del pelimorado. Tomó su cintura y lo penetró lentamente.—

Ouma: D-duele... Mucho... Me vas a matar... S-sa ¡aaaahh!~ ¡aaaahh!~ ¡aaaahhhh!~

Saihara ya se había comenzado a mover rápidamente, Ouma sentía dolor pero también sentía la sensación rara que había sentido todo este tiempo pero muy fuerte, casi parecía como si su cuerpo quisiera eso que movió su trasero para que el pene de Saihara llegara más profundo.

Ouma: ¡Aaaahhhh!~ ¡S-saihara-chan!~ e-está muy caliente... ~

Saihara: ¡O-ouma...!~

Saihara no dejaba de casi sacar su pene hasta la punta para luego meterlo de golpe, luego cambió a mantenerlo adentro moviéndose fuertemente casi queriendo llegar al estómago.

Saihara: ¡M-me corro!~

Ouma: ¿Q- ¡AAAAAAAAHHHH!~

Ouma sintió una sensación demasiado cálida que hizo babear y caer rendido, su mente estaba llorando pero su cuerpo estaba realmente satisfecho, Ouma miró a Saihara con la vista nublada. Saihara lo abrazó para que ambos quedaran dormidos.