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Llegamos

No me había dado cuenta por estar tan sumergida en mis pensamientos. Bajo del bus de inmediato, tenía que ir a mi casa y recoger lo necesario para vivir lejos de mis padres, no crean que me mantendría con el poco dinero que les cogí, tenían mis ahorros

Al bajar veo el cielo, la noche ya presente, el viaje no abra durado más de cinco horas, el cielo está despejado, lleno de estrellas, cada una al parecer luchando por ser visibles ante la sofocante luz de los faroles. No espero más y comienzo mi camino, no pensaba pasar la noche en mi casa iba a la de Haneul

A lo lejos veo un teléfono público, me acerco a él e introduciendo algunas monedas, marco a Haneul

- ¿Aló?

-Haneul, soy yo, Leah

-Mujer, ya llegaste supongo, después de tu último mensaje te estuve llamando, pero no contestabas ¿Que paso?

- tuve que tirar mi teléfono, estaba siguiéndome mediante el GPS

- ¿De qué huyes Leah? ¿Qué es lo que exactamente ha pasado?

-Tranquila Haneul, pronto estaré en tu casa y te contaré todo, tengo que irme, en unas horas te veo, adiós

Tomo un taxi y me dirijo a mi casa y cuanto menos me lo espero ha habíamos llegado, al entrar los recuerdos me invaden, desde que era pequeña junto a Laura cuando creía que la Vida era lo mejor, cuando no tenía preocupaciones, después cuando poco a poco iba creciendo, cuando ella me apoyaba, me consolaba después de que en el colegio me fastidiaban por mí rareza, Laura fue mi soporte por mucho tiempo y el que se haya ido así solo por protegerme... La culpa no me deja en paz

-No es tu culpa Khara

-Lo es Samael

- Sin importar que te diga esa idea no te la quitarás ¿Cierto?

-Lo dudo

El suspira- Vamos, no creo que tengamos mucho tiempo

Subimos a mi cuarto y una vez en el cojo una de mis maletas y comienzo a poner gran cantidad de ropa dentro, Samael me ayudaba acomodando la ropa y también viendo algunos zapatos, no sabía por cuánto tiempo estaría lejos de mis padres, pero era mejor prevenir que lamentar. Una vez ya con la cantidad de ropa que creo yo era suficiente, de debajo de mi cama saco una pequeña caja y de ella extraigo los fajos de billetes que había estado ahorrando desde pequeña, llegó el momento de usarlos

Con otra mochila me dirijo a la cocina, abro los gabinetes e introduzco la comida no perecible que se encuentre en mi casa, una vez que la mochila está a tope, decido salir, pero algo me detiene, veo la puerta del cuarto de Laura, con algo de duda me acerco a él y entro

Todo está muy ordenado, ella no tenía muchas cosas por lo que logro ver, ella tiene un pequeño escritorio, en este logro ver algunos papeles desordenados y algunos hechos bolita, ya arrugados. Cómo ya es tan típico en mí, la curiosidad puede conmigo ¿Porque está así? Todo está ordenado a excepción del escritorio

En algunos papeles había palabras, estaban escritos

"Querida Leah, mi pequeña Khara"

"Mi Khara"

"Leah... No sé cómo decirte esto..."

Todos comenzaban así, leo cada uno de los papeles que se encontraban regados, pero ninguno decía nada aparte de cuánto me quería, desesperada veo los papeles arrugados, algunos en la papelera, no dudó y también comienzo a leerlos hasta que encuentro uno al parecer ya terminado

"Querida Leah... Mi niña ¿Cómo es posible que hayas crecido tanto?

Escribo esto para pedirte que me entiendas y tratar de ayudarte a entender las dificultades de tu vida, espero que no tengas que leer esta carta y que yo te haya dicho todo, pero si no es así... Te pido me perdones por haberme apartado de ti, por dejarte en tales circunstancias, sé que mi deber como tú educadora es muy difícil por lo que no te preocupes por mi ida, si no estoy a tu lado ten en cuenta que me fui tranquila porque conocía mi destino y en especial porque fui muy feliz cuidándote

El Diablo Enamorado© (Elegidos I) [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora