Futari no Christmas

Cap. 3: Triste recuerdo

--Te lo contaré porque siempre has estado conmigo y sé que de verdad me amas, aunque no puedo corresponderte
--Está bien - Ryuji casi sentía que no podía respirar y era consciente de que se había ruborizado; era la primera vez que Omi se portaba así con él y aunque lo estaba rechazando, se portaba más cariñoso que nunca.
--Bueno~ hace 3 años, en la escuela yo tenía un amigo... pero lo conocía desde que tengo 15 y... en realidad no era mi amigo... O sea sí, pero... -no sabía bien cómo explicarlo y parecía nervioso-se volvió mi pareja al año siguiente de conocerlo. Él era pobre y no tenía madre, su padre siempre estaba trabajando y él logró entrar a la misma escuela que yo por una beca, era muy inteligente y siempre que se acercaba la navidad se alegraba mucho porque le encantaba aunque no recibiera regalos...Yo siempre le preguntaba que quería que le regale y el sólo me decía que no podía comprarle lo que quería...

/*En la narración de Hiroomi*/

Estaban Omi y su pareja, Takanori, sentados en una banca mirando a la gente que pasaba mientras conversaban.

-- Tengo mucho dinero -comentó presumiendo un poco- bueno~ en realidad mis padres, pero es igual~, te puedo comprar cualquier cosa, así que dime qué quieres
-- Gracias Omi pero sólo hay una cosa que quiero y tal vez tú puedes dármelo pero tienes que adivinar que es -sonrió alegre y lo miró esperando su respuesta.
-- No se me ocurre nada -dijo despreocupado- para alguien como tú que no tienes mucho, puedes querer demasiadas cosas
Takanori lo miró con cara de pocos amigos y le tiró un lapo en la cabeza.
-- Ok, sólo bromeaba - se disculpó Omi a la vez que se sobaba la cabeza por el instantáneo dolor que le dejó, mientras tanto Takanori continuaba serio - lo siento, no quise ofenderte pero es cierto-
Siguió mirándolo mal
-- ¡Mira Omi! -De pronto otra vez parecía feliz y le señalaba un niño que estaba al frente de la calle.
Omi buscó entre la gente entrecerrando los ojos para ver bien- Es un niño del orfanato que está más allá, he visto esa insignia ahí ¿y? -miró a su pareja preguntándole con la mirada qué tenía de especial aquel niño.

El niño era pequeño como de 6 años, de piel blanca, cabello corto oscuro y tenía varios lunares en la cara. Llevaba ropa sencilla y gastada, en su chompa al lado del pecho a la altura del corazón, estaba la insignia del orfanato al que pertenecía.

-- Él es un niño pobre y sin madre, igual que yo -dijo seguro de sí mismo.
--¿Haa? -dijo sin comprender que pasaba- ¡ey! ¿a dónde vas?

Takanori se paró rápidamente y Omi trató de agarrarlo para que no se vaya pero no puedo evitarlo.

-- Hola pequeño - se acercó al niño y se agachó para estar a su altura- ¿por qué estás llorando y qué haces aquí solo? Tu escuela está por allá -señaló.

Por debajo de sus manitos, con las que se cubría la cara para que no notaran su cara llorosa, vio que era un chico agradable, así que decidió contestar

--Pronto será navidad, onii-chan y... - al darse cuenta que no sabía con quién hablaba, dejó de sobarse la cara y bajó sus manitos para ver bien de quién era esa amable voz- ... y el regalo que me prometieron mis maestras - otra vez le volvían las ganas de llorar- ...no me lo podrán dar, porque dicen que no alcanzará el dinero y darán prioridad a los menores...
-- Pues~ -Takanori contestó aun pensando en lo que debía decir- ... -adivina qué -le sonrió transmitiendo alegría- yo te puedo comprar lo que quieras - le agarró las manos al pequeño en modo de consuelo.
--¿En serio? -Dejó de llorar pero aún aspiraba los mocos que le caían
-- Sí, pero no te vuelvas a escapar, ¿ok?
--¡Ey! -Omi estaba parado atrás de él y le dio una patadita a su pareja en el trasero-en modo de protesta por dejarlo -¿qué le estás diciendo?
--¡Entonces, quiero un auto a control remoto! -empezó a saltar de la emoción aplaudiendo como foca- y también algo más... - se quedó pensativo un rato mirando a todos lados del suelo, luego a Takanori y a Omi, que estaba de brazos cruzados mirándolo - mejor no... -cambió de opinión al pensarlo mejor- así que está bien el auto, creo -dijo convenciéndose a sí mismo.
--¿Seguro?... -preguntó Takanori preguntándose qué podía ser lo otro que hubiera querido - ... bueno~ te daré el auto si es lo que quieres - dijo lentamente mirando la nada, parecía que mientras hablaba mil cosas pasaban por su mente.
--¿Por qué le ofreces algo que no le puedes dar? - Omi, que estaba algo enojado, levantó del brazo a Takanori de un tirón- sólo se está aprovechando de ti
-- Omi... es sólo un niño
--Ni siquiera lo conoces- aún no le convencía.
--Si se lo puedo dar, trabajaré a medio tiempo y con lo que gane se lo compraré - le da unas palmadas en el hombro para que se calme.
--No te entiendo -dijo molesto- ¿y tu tiempo para estudiar?, además con eso podrías comprar cualquier cosa para ti
--Desde que nos conocemos nunca me has dado un regalo en navidad porque nunca adivinas que quiero -se enojó un poco.
--Es que ni si quiera me das pistas -se desordenó el cabello con la mano sintiéndose culpable.
--Navidad siempre es mi día más feliz y quiero intentar que para este niño también sea así
--No entiendo porque te gusta tanto pero está bien... no te diré nada -se resignó.
--¡Siiiii! -Gritó de alegría el niño que todo ese rato los miró atentamente- ¡tu papá lo aprobó onii-chan! -le abrazó la pierna, estaba muy feliz.
--¿Papá?... ¡¿él mi papá?! -Exclamó riendo a carcajadas- él no es mi papá~ -ya casi estaba llorando de la risa y le dolía el estómago- te a dicho viejo, ¡Omi! -le da una fuerte palmada en la espalda.
--¡Niño! -Gritó enojado- no soy su padre ¡¿entiendes?! -Se agachó para estar a la altura del niño y lo miró desafiante-soy su novio, ¿entendido?
--¡Omi! -lo regañó Takanori y el niño se escondió apretando más su pierna- ¡no lo intimides! -le volvió a dar un lapo mientras lo levantaba para que se aleje del pequeño.
--¡Lo siento novio de onii-chan!... -asustado el pequeño, se soltó y se acercó a Omi -pensé que eras su padre porque parecías mandón como la maestra
--¡Ya ves mandón! -continúo Takanori riéndose-

Omi miró al niño y ahora él también empezó a reír -ok niño, te perdono porque eres lindo -le alborotó el cabello aún riendo y miraba a su pareja que también se veía muy feliz- entonces haremos esto, el 24 venimos a darle su regalo y de ahí vamos a mi casa a pasar el 25
--Gracias Omi - su pareja lo abrazó con fuerza- ... te quiero -le susurró al oído-...

/---fuera de la narración---/

Hiroomi se quedó callado mirando la nada y Ryuji solo lo miró preguntándose por qué no continuaba con la historia; hasta que del ojo de Hiroomi salió una lágrima.

--Omi ¿estás bien? -se preocupó- si quieres ya no tienes que continuar. Parece que para ti es difícil hablar de esto...
--No te preocupes -dijo Omi viendo que Ryuji empezaba a preocuparse- estoy bien, y dije que te lo contaría así que eso es lo que haré

Se secó la lágrima y su amigo se alejó un poco, lo necesario para darle su espacio.

--Después de ese día, él se puso a trabajar como había prometido, muchas veces yo le ofrecí ayudarle a pagar una parte, pero era terco e insistía en que lo haría sólo. Así al fin juntó la cantidad necesaria y el 24 lo acompañé al orfanato para que entregara el regalo.
Cuando estábamos cerca, el niño ya nos espera en la puerta y a lo lejos nos vio, cuando se fijó en que traíamos el regalo, salió corriendo alocadamente sin obedecer a su maestra. Mi pareja también se alegró mucho al ver lo feliz que era el niño y también corrió a su encuentro. Yo empecé a correr tras él y en ese momento me percaté de que alguien sospechoso venía corriendo hacia nosotros... Era un delincuente escapando de la policía y estaba armado, así que empezó un tiroteo por lo que todos se tiraron al suelo, pero el niño que aún era pequeño no entendía del todo lo que pasaba o que tenía que hacer, así que se asustó mucho y corrió hacia nosotros que ya estábamos en el suelo cubriéndonos, y que estábamos más cerca que su maestra, que también estaba en el suelo cerca de la puerta del orfanato.

El delincuente ya estaba corriendo por nuestro lado, así que la policía detuvo los disparos. En ese momento aprovechó y le dio un tiro a uno de ellos y seguido de eso, vio al pequeño acercándose. En ese momento mi pareja vio rápidamente las intenciones de ese hombre y saltó desesperadamente a proteger al pequeño; el hombre disparó y siguió huyendo, más allá en la esquina de la cuadra lo rodearon y lo capturaron.
El policía que fue disparado se encontraba bien, por suerte no fue nada grave... pero el de él si fue grave... le había caído cerca al corazón, protegió al niño... pero a cambio de su vida...