Futari no Christmas

Cap. 13: Reunión de Navidad

-Hiroomi!! - gritó Takahiro tocando la puerta- estás bien? Te escuché gritar! -no recibió respuesta y pateó la puerta- Omi!!!

Takahiro estaba preocupado por lo que salió corriendo en de la casa para ir por afuera y entrar al cuarto de Omi por la ventana. Para ese rato, Omi ya se había calmado un poco pero aún lloraba. Takahiro al verlo no supo que hacer, solo se le ocurrió abrazarlo para reconfortarlo. Hiroomi solo aceptó el abrazo sollozando.

-No sé porque lloras -dijo finalmente, Takahiro- pero... No tengo mucho tiempo, así que te lo diré ahora... - respiró hondo y continuó- la Navidad es como el cumpleaños del niño Jesús, por eso es muy importante, ya que el 25 de Diciembre recordamos su nacimiento y lo que hizo por nosotros. Por eso cuando se va acercando la fecha tienes que prepararte, siendo una buena persona no solo para recibir nuestros regalos sino porque es lo que Jesús nos enseñó y lo que desea. Que compartamos con los que tienen, a ser honrados, bondadosos, que no seamos avaros y muchas cosas más... El 24 a la media noche, de ser posible, tienes que estar con tus seres más queridos para demostrarles cuánto los amas. Lo más importante no es lo material, sino que seas feliz y agradezcas por todo lo que ya tienes. Navidad es para estar todos juntos en armonía y...
- Porqué me dices todo esto? - preguntó un confundido Omi soltandose del abrazo.
- Por que es importante saberlo... Yo sé cuál es el deseo que tú pareja tanto deseaba todas las navidades desde que te conoció
- Cuál era?! -la curiosidad lo mataba.
-No te lo diré - sonrió- él nunca te lo dijo porque quería que tú lo adivinaras

Takahiro se puso de pie y salió de la habitación.
Hiroomi no entendía nada de lo que ocurría y recordó que ayer Takahiro parecía que le diría algo importante pero por culpa de Ryuji no terminaron de hablar. Tampoco estaba seguro de si ir con su amigo a la reunión de la universidad, así que le preguntó al reno que estaba en su cuarto y le animal solo le respondió volviendo a entregarle la cámara.
Omi no sabía que hacer con eso y le preguntó si quería que se tomarán una foto juntos, a lo que él animal muy alegre asintió con la cabeza. Al tener la aprobación del reno, primero le tomó una foto a él solo y luego se juntó a él para tomar una selfie de los dos juntos.

Después Hiroomi invitó a Takahiro y Hokuto a salir como disculpa por haberlos hecho dormir en la sala. Les enseñó muchos lugares bonitos que él conocía y se tomaron un montón de fotos. Los tres se divertían como nunca. Regresaron a la casa por la tarde, justo para que Hiroomi se aliste para ir a la universidad por la reunión, ya que ese mismo día a la media noche sería Navidad, pero la reunión duraría hasta las 6 o 6:30 aproximadamente, por lo que luego todos podrían pasar Navidad en compañía de quien deseen.

Salieron los tres juntos rumbo a la reunión dónde les esperaba Ryuji y sin que lo notarán el reno los siguió.
Cuando llegaron Ryuji planeó ignorarlos, pero al cabo de un rato rompió su promesa y se les acercó porque no pudo evitarlo y ambos amigos se reconciliaron como siempre que discutían.
Con el pasar de a horas, Hokuto y Ryuji se volvieron amigos, ya que Ryuji había entendido que no podría ganarle a Hokuto y había perdido... De todas formas él siempre supo que Hiroomi solo lo veía como un amigo pesado.

Faltando poco para acabar la reunión de Navidad, intercambiaron regalos y al término, todos se fueron retirando. Ryuji se fue a la casa de sus padres para pasarla con ellos. Omi y las estrellitas también volvieron a casa muy felices.

-Omi, gracias por todo pero nosotros ya tenemos que volver al polo norte - explicó Takahiro- se nos hará muy tarde
-No quiero volver!! - protestó el pelirrojo haciendo pucheros.
- Sabes que que tenemos que volver!
- Si lo sé - rodó los ojos-... Omi!!! - chilló mientras abrazaba al nombrado.
-Nos volveremos a ver - correspondió el abrazo- verdad, Hoku-chan?
-Por su puesto!! -le sonrió mostrándole los dientes.

Los se abrazaron más fuerte y esta vez sí se darían el beso que tanto estaban esperando pero nuevamente el reno se interpuso y los separó con sus cuernos.
Hokuto se enojó porque nunca les dejaba besarse y Omi solo río diciendo que seguramente estaba celoso porque Hokuto no era tan bueno para él y continuaba burlándose del pobre pequeño, hasta que esté se cansó de las burlas y le tiró una bola de nieve en la cara y Omi quedó perplejo pero al rato le devolvió dos bolas de nieve y así los dos se pusieron a jugar con la nieve en el jardín de adelante de su casa, en la puerta. Al poco rato cuando se cansaron se acordaron de Takahiro, que seguramente estaría en el patio de la casa alistando el trineo y a los renos para irse. Omi fue a buscarlo mientras que Hokuto se quedó tirado en el sillón.

-Takahiro!!! -lo llamó Hiroomi buscándolo.
-oh, ya terminaron de jugar? -se soba el ojo con el dorso de la mano.
- Estás llorando? - preguntó Omi angustiado y se le acercó despacio.
- Cla-claro que no! - tartamudeo un poco y le dió la espalda terminando de alistar el trineo.
-No me mientas! -lo jaló del brazo volteandolo para verle la cara- Porque lloras? -no le respondió- Cierto, no me dijiste porque no te volvería a ver! Por favor dímelo!... Me duele mucho verte así, no soporto ver un Takahiro débil... -lo abrazó con ternura y le susurró al oído- verte llorar hace que yo también quiera llorar

Takahiro se sorprendió un poco por lo que escuchó y se separó de él aunque aún luchaba por que sus lágrimas dejaran de caer. Trató de hablar calmado pero al intentarlo otra vez volvía a llorar.

-Takahiro!! En serio!! Tú no eres así -le reclamó Omi- me rompe el alma verte así

Al ver que no se calmaba, Omi volvió a abrazarlo fuerte y le acarició el cabello delicadamente. Takahiro solo acomodó su cara entre el espacio de la cabeza y hombro del menor y dejó que lo consuele. Hiroomi llamó a Hokuto diciéndole que el trineo estaba listo pero antes debía llevar a Takahiro a un lugar.
Hokuto llegó corriendo y preguntó que pasaba con Takahiro, a lo que Hiroomi respondió que no era nada y que se iría adelantado él con los renos y el trineo. Irían a un pequeño cerro que se veía desde ahí mientras Hokuto esperaba ahí y luego iría a alcanzarlos cuando Omi le diga.

Hokuto se quedó esperando sentado en el patio, tal como le dijo Omi le ordenó y vió como ellos dos y los renos se alejaban hacia el pequeño cerro, que de alguna forma de lejos se veía con forma de cabeza de reno de perfil.