Fred llevaba una semana sin dormir más de 2 o a lo mucho 3 horas por día, tenía una barba algo corta y estaba sentado en la silla de una mesa de cafetería, en frente suyo estaba Briton, su amante desde hacia algunos meses, solían verse en el departamento de Briton para no profanar la cama de Railey, la esposa de Fred. Briton era menor que Fred por diez años y no le importaba mucho si este se acostaba con su esposa, con él o con más personas, sólo tenía interés por una sola cosa: el dinero; pero esto no lo mostraba cuando estaba con Fred, sólo tenía un inconveniente algo fuerte: los problemas de Fred eran regularmente sus problemas también, si su esposa los cachaba, sabía que Fred la eligiría a ella por encima de él y lo dejaría y era justo lo que creía que estaba pasando. Se crusóde brazon y se tomó la frente para evitar una jaqueca.
- ¿Cómo lo sabe?
- No lo sé.
- ¿Estás seguro de que nunca la has visto?
- Si - meditó unos segundos - si, si estoy seguro - sentenció.
- Dime que no lo ibas a hacer con ese dinero. - Fred agachó lentamente la mirada. Briton ardió en cólera internamente ¿cómo puedes ser tan estupido? su cabeza clamaba que se lo gritara, pero tragó saliva para así poder lanzar ese pensamiento por la borda.
- No importa, estarás bien.
Ambos posaron las miradas en la taza vacía de Fred, guardaron silencio un par de minutos, pensando cómo proceder.
- ¿Lo sabe tu esposa? - Briton dirigió la mirada hacia Fred, poniéndole atención.
- No, le llamé y sonaba normal - Britos suspiró de alivio.
- ¿Vienes a casa?
- Estoy algo cansado
- Sólo a descansar
- No, te veo en la noche, en el bar
- Tal vez no puedar ir, estoy trabajando con una revista que me exige demasiado.
Fred se arrepintió profundamente de estar con alguien que se mueve en el ámbito social, ya que si bien no era directamente famoso, tendía a ser conocido por mucha gente. Por su parte, Briton se presionaba, su trabajo pendía de un hilo, se sentía observado la mayoría del tiempo desde que comenzó su amorío, pero todo lo soportaba con tal de tener dinero, quería más que nada ser ricp y poco importaba si tuviera que asesinar a Fred o a quien sea, ahora lo importante era acostarse con él un pocco más de tiempo y un leve porcentaje de posibilidad de obtener lo que quería.
En la noche, cuando se disponía a irse del estudio de fotografía, luego de una riña con los editores de la revista para la que trabajaba, Fred le llamó, pero estaba demasiado ocupado recogiendo las fotografías y demás documentos, que no pudo contestar, saltó el contestador, pero no dejó mensaje, como era usual.
Al salir del estudio, había dos sujetos esperándolo en la entrada de la puerta, uno vestía una chupa de cuero y vaqueros pálidos, una barba larga y un semblante de pocos amigos, el otro resultaba un poco menos amenazador, tenía tez morena, aunque no era bajo de estatura, no llevaba barba, pero tenía un traje muy formal, contrastaban de una forma aterradora, este último jugaba con un puño de acero, lo que faltaba, pensó Briton y olvidó su idea de dirigirse al auto.
- ¿A qué vienen ustedes?
Se miraron entre ellos y luego lo miraron.

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die Dunkelheit
Mystery / ThrillerScarlett maneja una empresa ilegal desde los cimientos , impulsándola aún entre las dificultades, se enfrenta a un oponente duro, es un misterio y un dolor de cabeza al que Scarlett se propone erradicar, enfrentándose con acertijos relacionados con...