2 de enero del 2013.
Enrollada entre sabanas y frazadas despierto por el horripilante sonido que emana del despertador, estiró mi brazo hasta que logró cogerlo y en menos de 5 segundos lo lanzó lo más lejos que puedo, al parecer se a roto, ya que dejó de sonar.
—Natalie levantate tienes que ir a trabajar ¿no pretendes llegar tarde verdad?.-
—Mamá sólo 10 minutos más, porfavor ¿bueno?- mientras le digo eso intento poner la cara del gato con botas, pero a quien engañó de seguro en estos momentos me parezco mas a shrek.
—Esa cara no ayuda en nada, ve a ducharte ahora y luego bajas a desayunar.
—Bueno, voy en seguida- suspiro, seguido a eso me lanzo al suelo y comienzo a arrastrarme como un zombie, siempre hay que añadir dramatismo a la situación.-
Mi madre suspira y rueda los ojos
—Cariño tienes 23 años ya eres una adulta, comportate como tal.- me ayuda a levantarme y lanzo el mas grande de los suspiros.— Bueno mamá me ire a duchar, porque estoy segura que no te iras hasta que vaya.
— Por eso eres mi hija, sabes exactamente lo que haré- me sonríe y sale de la habitación.
Creo que lo que más extrañare cuando me vaya de casa será a mamá.
Después de un baño de 30 minutos, me visto y bajo a desayunar.
— !Oh vaya esto se ve increíble!- siento que comienzo a babear, así que por seguridad tomó una servilleta —Mamá esto parece un banquete si ganó peso será tu culpa.- agregó con mi cara de sufrimiento simulando un llanto.
Mi madre comienza a reír a carcajadas, su rostro se vuelve completamente rojo, creo que en cualquier momento dejará de respirar , no creo que sea para tanto pero bueno.
—Cariño calmate respira- dice mi padre de igual manera riéndose por la situación, luego se dirige a mí con una sonrisa —nose porque esta así , pero es mejor así podemos comer mucho- dice mi padre con entusiasmo.
— !Ahhh!- todos dejamos de comer para observar al dueño de ese grito, mi hermano —me duele mucho- dice con sus ojos llenos de lagrimas, me paro y camino hacia el.
—Hijo ¿que pasa?, ¿Donde te duele?- pregunta mi madre preocupada.-
—Aquí, aquí, justo aquí- con su mano indica la parte inferior derecha de su abdomen.
—Mamá creo que puede ser apendicitis- digo, por mis pequeños conocimientos de medicina obtenidos por Grey's anatomy.
—Ok vamos todos al auto enseguida iremos a la clínica, tranquilo hijo- papá toma a Chris en brazos y lo lleva al auto.
Todos subimos al auto con una expresión de preocupación vamos lo mas rápido posible a la clinica, estoy abrazando a mi hermano y le digo que todo ira bien, pero aún así estoy preocupada, no quiero que le suceda nada tan sólo tiene 10 años, aún tiene toda una vida por delante. Si lo se puedo ser un poco dramática con la situación pero hay un montón de malos escenarios para algo simple como una apendicitis.
Apenas llegamos, unas enfermeras llevaron a mi hermano a un box, ya que se veía era de urgencia , yo estoy de pie junto a la puerta esperando a que el doctor salga y nos diga que sucede.
La puerta se abre y por ella sale el doctor —Señor y señora Anderson?.
—Si, si somos nosotros ¿que tiene nuestro hijo?- pregunta mamá.
—Su hijo tiene apendicitis, lo tenemos que operar enseguida, no es grave ya que llegaron a tiempo, pero de igual manera la operación es necesaria.
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La fuerza del amor
عاطفيةEl Amor está donde menos lo esperamos. Las personas pasan la vida buscándolo pero este llega cuando menos lo imaginas. Algunas personas lo llaman destino, jamás creí en aquello pero me di cuenta de que la vida a veces te sorprende y el amor te encue...