CLAUDIO Y EMILIA |Claumilia| One Shots

Todo se sabe

*Se ubica depués del beso de Claudio y Machu en este no es Kevin quien toma la foto, sino Katy*

Narra Claudio

Después del beso con Machu me sentí demasiado culpable, al regresar a la habitación y verla ahí tan tranquila, durmiendo con Martina, se veían preciosas las dos. No me pude creer la idiotez que acababa de hacer y ciertamente, Machu me había besado a mi, pero yo no la aparté tan rápido como debí haberlo hecho.

Días después de  aquello intenté decirle a Emi la verdad pero mi mamá nos interrumpió. Y aunque no lo planeaba hacerlo de esa manera, al final le dije que Emilia era mi novia y Martina su hija. Mi madre no se lo tomó muy bien y Emi tampoco.

Como si no tuviese suficiente, me llegó un correo anónimo donde habían fotos mías del beso con Machu, por si fuera poco, en las fotos parecía que el beso fue mucho más intenso de lo que en realidad había sido. Luego descubrimos que Katy era quien las había tomado y quiso chantajear a Machu pero ella no la dejó. Aún así Machu y yo habíamos decidido decirles la verdad a León y Emilia, pero yo simplemente no había encontrado el momento.

Encima de eso, ahora mismo tenía a mis padres reprochándome por estar con Emilia.

-Es que no puede ser posible que andes con alguien así, Claudio. Por Dios.- dijo mi pdre.

-Aún no entiendo para qué le dijiste.- me dirigí a mi madre.

-Por que me importa, ¿crees que no me preocupa que arriesgue así tu futuro?

-No sé de qué me hablás, no estoy arriesgando nada.- dije con frustración.

-Claudio, no te hagás el tonto por favor, estar con una chica que tiene una bebé es algo muy delicado.

-Si además, por lo que me cuenta tu madre, tampoco viene de buena familia.- continuó mi padre

-Entonces de eso se trata ¿no?, si su familia tuviese plata, entonces no tendrían problema.

-No se trata de eso, Claudio.- respondió mi madre.- Simplemente no es bueno para ti.

-¿Tú que crees que está buscando una chica que tuvo hijos a esta edad?.- dijo mi padre

-Está buscando alguien que la mantenga.- prosiguió mi madre y entonces fue cuando me harté.

- A ver, Emilia no es así.- dije pero mi padre me interrumpió.

-Esa niña y su bebé ya no tienen futuro, pero tú sí, Claudio.

- Bueno ya, paren los dos.- estallé.-  Si alguien de mis amigos a quien admiro porque es la única que tiene claro su futuro y pelea por él, es Emilia.

- Mira, a mi no me hablas así eh.- me dijo mi padre.

- Pues entonces no hables así de mi novia sin conocerla ¿está claro?.- espeté- por que gracias a Emilia por primera vez en mi vida me pregunto qué carajo quiero y qué tengo que hacer para conseguirlo ¿sí? Porque ella me ha enseñado sobre el trabajo duro y la perseverancia.

-¿Es- estás seguro?.- intervino mi madre.

-¡Si! si estoy seguro y no sólo eso, es la primera vez que estoy con alguien que no le interesa cuánta plata tengo ni cuál es mi apellido. ¡Le importo yo y le gusto yo!

-Claudio yo no sabía.- dijo mi padre pero no lo dejé terminar, estaba demasiado enojado para seguir escuchando.

-No, no sabías porque no preguntás. Pero lo más importante es que la amo y que estoy enamorado de ella. Y vos no tenés ningún derecho de criticar mi relación si no querés que yo critique la de ustedes... o la otra.

-Nosotros solamente queremos que te cuides, Claudio.- dijo mi madre.- no queremos que hagas una tontería, esa bebé no es tu hija.

-Si, tal vez no sea mi hija pero la adoro al igual que a su madre. Y nada de lo que me digan me hará que cambiar de opinión. Y si no les gusta... yo no puedo hacer nada.- dije me dispuse a salir de la habitación. 

Cuando salí, vi a Emi sola, parada en el pasillo y ella se abalanzó sobre mi a besarme. Un beso muy apasionado y lleno de amor. Se separó unos pocos centímetros de mi.

-Yo también te amo y te adoro.- me dijo y yo no podía creer lo afortunado que era de ternerla en mi vida. La abaracé como si no hubiese mañana y unas lágrimas de deslizaron por mis mejillas, me dolía saber que mis padres no apoyaban mi relación, pero aún más saber que tarde o temprano tendría que decirle la verdad a Emi y no sabía si ella sería capaz de perdonarme.