Capitulo 0 - Isa, el espejo

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El aroma que provenia de la cocina volvio a despertarme, ahi estaba otra vez haciendo mi comida favorita. Desayunar con alguien como ella hacia mis mañanas mas amenas, realmente disfrutaba mucho su compania al punto de perderme en mi misma. Su sonrisa era muy tierna y su compania muy calida. El tiempo parecia no seguir su curso. Cuando pude darme cuenta ya era hora de irnos a trabajar. -Nos vemos mas tarde- le dije y sonrei como si fuera la ultima vez, obviamente teniamos distintos rumbos.

La ruta que tomo para ir al trabajo siempre me da tiempo a pensar en tantas otras cosas, pero mas en cuanto quiero volver para estar en casa con ella. Levantar la vista y ver el sol sobre mi me hace pensar que es un dia muy hermoso para estar encerrada trabajando. No disfruto mucho mi trabajo pero tampoco lo odio, es solo un trabajo. Mis compañeros tampoco sobresalen mucho, parecen aburridos y casi no hablo con ellos. Por otro lado mi gefe, aunque pocas veces lo veo, parece buena persona.  En fin, es lo que tengo y para mi esta bien despues de todo sigo trabajando ahi incluso con todo ese ruido y la monotonia, hoy sera un dia largo.

Al salir fui a comprar las cosas para la cena, eso es tarea mia y creo que hoy hare algo rico para las dos, sin dudas se que le encantara. El sol cae y deja ver las estrellas, el camino a casa se ve hermoso de noche y aunque sigo caminando mis oidos continuan escuchando todo ese ruido, creo que se me a quedado grabado. Solo seguí caminando.

Finalmente llegue a casa, fue un día duro pero asi es mi vida ahora solo quedaba hacer la cena mientras esperaba.
Cosinar es tan relajante, me hace pensar en ella. Su carita cachetona, sus ojos tiernos, su voz dulce, los calidos abrazos, sus besos, todo.
Esta vez si me luci , la cena ya casi esta y huele muy rico. Aunque estoy algo cansada  esta es la mejor parte del dia cuando vuelvo y podemos estar juntas otra vez, solo falta que llegue. Ya quiero verla atravesando la puerta, ya quiero un abrazo, quiero verla sonreir y comer juntas, acariciar su carita.

Y ahi esta ella, atravesando la puerta, tan hermosa como siempre, sonriendo para mi como si nada hubiera pasado. Con esas mejillas sonrojadas, con su voz tan fina pronunciando mi nombre y haciendome saber que llego a casa. Que reconfortante es tenerla en mis brazos despues de un dia tan largo, no quiciera soltarla nunca. Nuestras comidas son en silencio, con sonrisas y miradas de por medio, se cuanto ama lo que cosino y la felicidad en su rostro me lo dice todo. Solo al terminar la cena, acostada en su regazo, puedo escuchar como fue su dia mientras acaricia mi cabello. Es tan hermoso que tengo que esforzarme por no dormirme, sus manos son muy suaves. Un abrazo calido era todo lo que queria al final del dia pero en ese momento debo admitir que ese beso fue mejor. Nada como unos cuantos besos para hacerte sentir desnuda frente al mundo, tan vulnerable y extasiada. Sentir un  placer tan grande que lo hace a uno quedarse fuera de sí. Sus manos recorriendome como un libro abierto disfrutando cada pagina de mi, inundandome con su boca. Trato de contenerme para no estallar pero quien podria, quier querría hacerlo?! Como no entregarse al placer?! Yo no iba a hacerlo.

Entonces el sonido en mi cabeza volvio. Ese sonido seguia ahi, ese maldito sonido como arruinandolo todo. No pude dejar de escucharlo y fue ahi cuando todo se volvio oscuro.

Isa -uwu- ItzelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora