Capitulo 1 - Isa, el ocaso

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Y vuelvo a ver el techo de mi habitacion, tendida en mi cama, escuchando como mi madre me llama para que baje a desayunar y el despertador sonando una y otra vez. Lo odio, tanto ruido hace que me de dolor de cabeza. En fin ya solo queda un dia antes de que vuelva a la escuela, realmente no tengo ganas que termine el receso escolar ademas ese sueño me dejo muy confundida, no recuerdo mucho y no pude verle la cara a la otra persona pero era muy profundo y crei que no despertaria. Amo el desayuno, la comida de mi madre es muy rica aunque luego me toque limpiar todo a mi y hacer las compras. Al menos de camino a la tienda puedo ir con mi gato que me acompaña a todos lados, es un dia muy lindo para caminar.

Esta vez si que mi madre me encargo muchas cosas y en distintos lugares. Era mas bolsas que persona y fue ahi que choque con algo por no ver por donde iba y sin darme cuenta termine en el suelo. Solo entré mientras ella salía y terminamos enrredadas en el piso mezladas con mis compras. Fue tan repentino que no pude reaccionar y ahi estaba esta extraña mirandome a los ojos como si nada y yo ensima de ella. El silencio se adueñaba de la situacion y es mas ella no dijo nada lo cual fue mucho mas incomodo teniendo todo mi cuerpo ensima del suyo. Nunca me habia sentido tan avergonzada en mi vida, solo me levanté para que pudiera seguir su camino y olvide disculparme con ella. Mi corazon latia muy fuerte, estaba acalorada, tenia la cara roja y las manos me temblaban. El rose de su piel con la mia me habia dejado su aroma... Bueno, pensandolo bien, no fue tan desagradable.

No pude verla bien pero aun asi algo en ella me causo una extraña sensación de reminiscencia, le pregunte al de la tienda si la conocia pero me dijo que definitivamente nunca la habia visto por estos lados. Entonces solo segui con lo mio puesto que aun tenia cosas que hacer.  Compre todas las cosas que me habia encargado mi madre y luego pase por el parque a tomar un helado antes de volver a casa. No pude evitar el seguir pensando quien seria esa persona con la que choque y antes de notarlo me estaba muriendo de verguenza otra vez. En fin, solo volvimos a casa antes de que se hiciera mas tarde.




Isa -uwu- ItzelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora