Desviando el destino

Cap. 20: La verdad.

Observo como Charlotte va agarrada de la mano de Seth, ninguno habla pero ambos sonríen
Me quedo inmóvil al tener sobre mi la mirada de los dos

-Amalia ¿qué haces aquí?- habla Charlotte desde lejos

Vuelvo a cerrar los ojos mientras tarareo una canción tratando de simular que no los escuché

Me quedo así por menos de 10 minutos para abrir los ojos y darme cuanta que ya no están...
Suspiro un poco mas aliviada y parándome me dirijo a la habitación, camino a paso lento y tranquilo, llego dando gracias de no haberme encontrado a nadie

Voy a la cama y tratando de no verme afectada por la escena que vi minutos atrás, escucho como alguien se acerca a la puerta y sin esperar mas me acuesto sobre la cama cerrando los ojos, para hacerme la dormida y que nadie me moleste
Oigo la puerta abrirse y a unos pasos fuertes, se escucha que es de hombre
Siento como esa persona se sienta al lado de la cama hundiéndola levemente

-Hola, pequeña

-Hola, Tobías- siento la tranquilidad volver a formar parte de mi, abro los ojos y sentándome nuevamente en la cama vuelvo a hablar-¿qué necesitas?

-Solo quiero hablar contigo...¿no puedo?

-si, sólo que no te esperaba

Siento como me abraza y me recuesta en la cama con él a mi lado, no tardo mucho en acomodar mi cabeza en su hombro
Mi cuerpo se relaja y mi mente se despeja, así pasamos 45 minutos o más antes de que me vuelva q invadir ese mal presentimiento
Tobías parece notarlo y comienza a acariciar mi cabello con micha delicadeza

-¿qué pasó?

-Es el mismo presentimiento de siempre- comento apenada

-No va a pasar nada...¿entendido?

-Si- le doy una sonrisa antes de que se levante y me ayude a pararme

-Vamos- habla con un toque de diversión en su voz

-¿ a dónde?

-No sé pero ya pensaremos en eso

Ya parados salimos de la habitación y vamos a la cocina, al llegar Tobías saca de un cajón unos globos, me doy cuenta de lo que planea

-Pequeña, ve a cambiarte- ríe mientras yo no tardo en correr a cumplir su orden

Ingreso a la habitación y traigo del ropero un short corto y una blusa sin mangas, estando ya lista salgo y comienzo a caminar a la cocina para encontrarme muchos globos ya llenos de agua.

-¿lista?- pregunta Tobías a mi espalda, volteo y veo que lleva puesto un short un poco flojo color azul marino

-Lista

Entre los dos traemos los globos al patio trasero y sin previo aviso siento estallar uno en mi espalda, dejándome quieta por unos segundos mientras aguanto la fría temperatura de el agua que tienen dentro, escucho carcajadas por parte de el detrás de mi y sin saber muy bien cómo...Tomo y lanzo uno a él dándole justo en la cara, las carcajadas ahora son por parte mía y luego comienza el juego...

Siento dolor en el estomago de tanta risa, ambos estamos completamente mojados por el agua de los globos, ninguno logra calmar su risa y eso nos da más risa

-Ya basta, me duele el estómago

Siento un globo mas en mi espalda y luego el frío líquido correr por esta

-Ya, esta bien- dice Tobías entre carcajadas

Cuando por fin logramos calmar la risa, entramos dejando un rastro de agua por toda la cabaña
Tobías entra a su habitación y yo voy caminando a la mía
Me despojo de toda la mojada y me meto a la ducha para poder sentir el agua caliente poner mi cuerpo a una buena temperatura
Al salir me visto con la pijama que uso y salgo en busca de algo entretenido para perder el tiempo