lección de amor MLB

Capítulo 11 "Secretos al descubierto"

Capítulo 11 "Secretos al descubierto"

Frases en negrita... pensamientos

-Tikki, la princesa Marinette te busca.

-Gracias Rosita, en un momento voy.

La pequeña pelirroja se encontraba en aquel hermoso jardín que tanto le gustaba, cortando las más bellas rosas para el jarrón de porcelana china que había en el cuarto de su ama, por ordenes del príncipe cortaba solamente rosas rojas, las favoritas de ambos. Tikki sonreía al recordar lo bien que ahora todo marchaba entre Adrián y Marinette, y mientras recordaba la noche anterior una envidiosa espina profano la mano que delicadamente la tomaba.

-¡Auch!- dijo introduciendo su dedo a su boca.

-¿Te lastimaste Tikki?

La chica quedo paralizada al escuchar aquella voz detrás de ella, quito el dedo de sus labios y tomo la canasta con flores que se encontraba en el suelo dispuesta a irse hasta que una mano la sostuvo de su brazo.

-¿Por qué huyes?

-C-Claro que no huyo; Marinette me necesita.

-Necesitamos hablar Tikki.

-No se de que podes hablar tú y yo Plagg.

-De todo Tikki, empezando por tu declaración, ¿Por qué no podemos estar juntos si nos amamos? Yo te amo.

-No insistas Plagg... Olvida lo que te dije ese día, seguramente no sabía lo que decía

Creo que fue un error habértelo confesado.

Camino deprisa hasta el castillo sintiendo su corazón latir muy rápido y sus piernas temblar como gelatina, camino hasta el cuarto de Marinette pero esta ya no se encontraba, dejando una nota a su doncella otorgándole el día libre, pues ella estaría en el convento junto a Adrián, Alya y Nino. Tikki sonrió feliz, era la primera vez que le otorgaban un día libre, cambio las flores de aquel jarrón largo de color blanco con toques azules. Salió de la habitación sin sentir la presencia de alguna persona cerca, al girar observo al pelinegro frente a ella y sintió un leve calor en sus mejillas.

-¿A ti también te dieron el día libre cierto?

-Me dejas pasar Plagg.

-Vamos al pueblo Tikki, como amigos, no diré nada que te haga sentir incomoda.

La pelirroja lo observo por un momento y no había en él aquella mirada intimidante y desafiante que siempre existía cuando ella estaba cerca él.

-Esta bien, acepto.- sonrió la chica.

Te veo después del almuerzo en la salida del castillo, te parece.- dijo feliz el ojiverde.

La doncella le devolvió la sonrisa y camino con la canasta en la mano, mientras desaparecía en una esquina sintió que una mano la jalaba, quiso gritar pero no pudo, una rubia de pelo corto le tapa la boca pidiéndole no hacer ruido.

-¡Me quieres matar de un susto Rosita!- chillo Tikki.

-Lo siento Tikki, pero no pude evitar escuchar lo de hace unos momentos... ¿Al fin tú y Plagg saldrán?

Tikki sonrió débilmente mientras entraban a una habitación vacía para no ser interrumpidas, dejo la canasta en el suelo y suspiro.

-Si, pero como plan de amigos.

-Tikki, si le dices la verdad Plagg entenderá, estoy segura.

-No es tan fácil como parece Rosita, y si el me desprecia por no ser la persona que el cree que soy. Como crees que el me acepte al saber que no soy la hija de unos humildes campesino como eh dicho, sino de una prostituta y un alcohólico adicto al juego