Luego de un año y medio Meredith Ukai regresa a Japón encontrándose con la sorpresa que su primo ahora es el entrenador del antiguo equipo de su abuelo, por lo que termina uniéndose al club para ayudar a los cuervos y que puedan volver a volar en la...
Keishin pidió tiempo fuera por recomendación de su prima luego del saque de Oikawa quien había puesto como objetivo a Tanaka.
-Sólo levántalo- dijo el rubio- aunque no vaya hacia el armador, mientras el balón se eleve, tendremos oportunidad de recuperarnos. -Tooru es muy calculador, querrá desmoronarlos uno a uno, comenzando con los más animados, no pudo con Yuu por lo que paso al siguiente- dirigió su mirada verde al de cabeza rapada- no le permitas cumplir con su objetivo y muéstrale tu espíritu de lucha. -Entendido. -Por cierto, Kageyama-kun- miro al mencionado el entrenador- ¿Qué fue el toque de hace un momento? -Lo siento, entre en pánico- se disculpo con una inclinación. -Si te diste cuenta, supongo que está bien, no es que esté mal hacerlo, juega a nuestro favor que el enemigo tenga que verificar todas las formas que tenemos, pero si leen que realizaras una jugada de dos toques, entonces será muy fácil para ellos detenerlo, elige bien el momento de utilizarlo. -Tobio se que puede ser difícil, pero mantén la calma- recomendó la peli-roja- un buen armador es aquel que ante todo guarda la compostura para así poder hacer sus jugadas con mayor precisión. -Entendido. -También, no olvides contra quiénes estamos jugando, no es contra Oikawa, sino contra Aoba Josai- recordó el mayor- además, no es tu pelea personal, sino la de Karasuno. -Entendido.
“¿Pelea personal?” pensó la entrenadora pues no estaba consciente del grado de rivalidad que había entre ellos.
Mientras observaba el juego iba indagando en sus recuerdos tratando de encontrar una relación entre ambos armadores, como un destello recordó las quejas del castaño sobre lo molestos que son los que tienen talentos o son llamados prodigios, sin comprender su enojo le pregunto a Hajime el porqué de sus quejas, él le explico sobre el nuevo kouhai de ellos el cual se notaba que tendría grandes habilidades en el futuro y eso molestaba al capitán quien se sentía arrinconado por ese nuevo miembro que lo alcazaba lentamente.
“¿Será él?”
A causa de las contantes fallas por conseguir mantener el balón en juego luego de los saques de Oikawa, sin mencionar el reciente bloqueo tras el remate de Tanaka, Karasuno tuvo que pedir su segundo tiempo fuera. Antes que el numero 5 se reuniera con su equipo golpeo su rostro con sus manos, dejando las marcas en sus mejillas.
-Lo siento mucho- se inclino frente a sus sorprendidos compañeros.
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-¡Ryu! Hay cosas que no pueden evitarse- dijo el libero- ese balón era difícil y había tres jugadores bloqueando, y yo también debí haberla recuper… -No pedí que me pasen el balón- interrumpió él- me asusté por un momento, demonios, me lamentare después del partido, no tiene sentido que alguien tan inútil como yo haga que mi equipo se deprima y le cause problemas debido a mi propio error, lo haré la próxima vez.
La joven con una sonrisa se acerco a él y coloco su mano en su hombro.
-Ryu- lo llamo dulcemente para calmarlo- no digas que eres inútil, eres más valioso de lo que crees y el hecho que hayas dicho todo eso solo es una prueba de ello, me alegro que no hayas dejado que esto te afecte.
