Dimples ; ShowHeon

Are You Okay?; Capítulo 16

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Habían pasado dos días después de lo acontecido. Jooheon tenía varios moretones en sus piernas y en sus brazos, las heridas en sus labios y en su cuello se hacían presentes como si fueran del mismo día.

Suspiró un poco mientras iba camino a casa, durante esos dos días no había sabido nada de Hyunwoo, durante esos dos días no había ido a la escuela y no le había enviado mensajes al pequeño, quien ya se estaba preocupando bastante.

Miró hacia arriba mirando que el cielo no era de un color azul pastel, era bastante gris, nubes grises al punto de llegar al color negro.
Pasó saliva fuertemente y notó que estaban empezando a caer pequeñas gotas de agua encima de él y en el suelo, creando manchitas húmedas en este mismo.

Escuchó que los rayos empezaban a presentarse de una manera que a Jooheon le hizo sentir escalofríos de solo escucharlos.
Sintió bastante miedo y se abrazó a sí mismo notando que el frío empezaba a penetrar por su blancuzca piel llegándole hasta los huesos. Gotas de agua empezaron a caer más rápido, haciendo que el pequeño se empapara.

-Jooheon!!!!!- Una voz lo hizo detenerse, aquella voz que lo tranquilizaba demasiado.
Se paró en seco y antes de voltear ya tenía a Hyunwoo a su lado poniéndole  su chaqueta de mezclilla en los hombros- Estás bien???

-E-en dónde has estado?~- Ignoró por completo la pregunta del mayor mientras lo miraba con sus pequeños y lindos ojitos cristalizados.

-Mi padre me necesitaba en la empresa, lo siento tanto, pequeño~- Hyunwoo se maldijo internamente, pues no le había enviado siquiera un mensaje al chico que le gustaba.

-Y-ya... Comprendo~- El pequeño lamió sus gruesos y lastimados labios mirando hacia abajo. Pero todos sus pensamientos siempre eran malos, ahora millones de preguntas lo invadían "Y si solo me está evitando?" "Y si ya lo aburrí o se le hice demasiado exagerado?" "Y si ya no me quiere".

Esas preguntas estúpidas hicieron que lágrimas empezarán a resbalar por las mejillas de Jooheon, combinándose con la lluvia que caía en su rostro.

-Oye... Qué tienes??- Obviamente Hyunwoo notó las lágrimas de Jooheon, pues estas eran demasiado preciosas como comprarse con la lluvia.

-N-nada... S-solo...- Apretó los labios fuertemente y sacó un pequeño sollozo para después mirar hacia arriba, directamente a los ojos del mayor- Hy-Hyunwoo... T-tu... Tú me quieres??~

El más alto no evitó sonreír como enamorado al escuchar la pregunta de su contrario. Se acercó un poco más a él quedando a escasos centímetros cuerpo a cuerpo y miró hacia abajo para poder presenciar los ojitos del menor.

-Pequeño... No sabes cuánto te quiero- Puso una mano sobre su mejilla acariciándola con suavidad tratando de apartar esas brillosas lágrimas.

-T-tu...

-Jooheon... Hay una persona en este mundo que le gustas, que haría todo por ti incluso en la peor situación, daría la vida por tu bienestar y tú salud... Hay una persona que te quiere por como eres... Es más, ni siquiera te quiere... Esa persona te ama, te desea, te necesita... Esa persona es tan feliz al verte sonreír, esa persona es tan feliz de poder admirar a un ángel en persona... Esa persona sonríe cada vez que recuerda tu nombre- Hyunwoo se iba acercando cada vez más al pequeño, quien escuchaba con atención las palabras del contrario.

-Y p-por qué esa p-persona no está aquí??- Preguntó sintiendo que su pecho palpitaba fuertemente sin siquiera saber el por qué.

-Esa persona está aquí... Frente a ti, esa persona soy yo, pequeño~

Dicho esto, Hyunwoo acercó su rostro al de Jooheon mirando y observando con detalle sus lindos y brillosos ojos.

-Jooheon, me gustas demasiado, te amo- Susurró sobre los labios del contrario, susurró apenas audible a pesar del sonido de la lluvia.

Pero para Jooheon la lluvia ya no se escuchaba, solo eran los latidos de su corazón, los cuales eran rápidos y bastante fuertes, y la voz de Hyunwoo, profunda y hermosa.

Jooheon cerró los ojos ligeramente al sentir los labios del mayor chocar con los suyos, en un lindo contacto. Sus piernas temblaron sintiendo que los labios de Hyunwoo encajaban de la manera más perfecta y precisa en los suyos. Como si fueran hechos para él.

Hyunwoo se acercó un poco más a Jooheon, tomándolo de aquellas hermosas mejillas creando un beso demasiado dulce y suave, en donde el mayor podía demostrarle todo su amor al pequeño. Podría demostrarle en ese beso el cuánto lo amaba, cuanto lo deseaba, y cuanto lo necesitaba, cuánto le necesitaba para ser feliz, puesto que una sola sonrisa por parte de Jooheon hacia que el día de Hyunwoo se tornara dulce y feliz.

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