Capitulo 21

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Llevábamos allí como 20 minutos esperando cuando sonaron unas trompetas y todo el mundo se cayó
Un hombre se puso en mitad de la gran escalera que había y habló

-Con ustedes, la familia real- miré a Declan, que también me miró muy sorprendido- El rey Edward Mountbatten-Windsor y la futura reina Elena Marsen- ambos bajaron juntos y todo el mundo por donde pasaban les hacía una reverencia, esto era irreal, nunca lo había visto, hasta que se pararon en un lado- a continuación nuestras majestades- no oí bien los nombres, pero bajaron dos niñas pequeñas casi idénticas- y por último, la heredera al trono de Inglaterra Madison Mountbatten-Windsor- hay fué cuando la vi con ese vestido que la sentaba mejor que cualquier otro que le hubiera visto, era negro, ajustado desde su pecho hasta la cadera, después se soltaba para caer en cascada con una apertura dejando ver una de sus piernas, tenía un escote de palabra de honor, nada muy llamativo, pero no la hacía nada para llamar la atención, unos zapatos de tacón negros y el pelo suelto y con tirabuzones y un maquillaje más natural del que solía llevar ella, estaba preciosa
-Cierra la boca que se te cae la baba- miré a Declan molesto
-Cállate, pesado- volví a mirar a Maddie, la cuál estaba horrorizada en cuanto nos vió, su cara era de desconcierto, todo el mundo acababa de descubrir quién era en verdad, incluidas sus amigas, las busqué con la mirada, las cuatro estaban juntas mirándose entre ellas, hacía mucho que no las veía juntas, lo que me hizo sonreir, finalmente Maddie se colocó con el resto de su familia y la fiesta empezó, mucha gente iba a saludarles
-¿Crees que debería ir?
-Creo que sí, ha pasado mucho tiempo Declan, debería de saber que estás aquí- asintió y ambos fuimos, pero antes de ir, tres personas se nos cruzaron en el camino
-¿Vosotros lo sabíais?- los dos sonreímos, no sabíamos que decir
-Era nuestra amiga, habría sido todo un detalle la verdad
-Ya bueno...- dijo Declan- en cuanto a eso... Es mi hermana, creo que tengo más poder yo- las tres le miraron impactadas, y yo también, ¿Llevaba escondiéndomelo todo este tiempo y a ellas se lo suelta sin venir a cuento?, Dios... Que hombre, en fin, no me iba a enfadar por ello, ya no importaba demasiado
-Oye...- interrumpí- deberíamos ir a saludarla- todas asintieron, pero ninguna con confianza, fuimos camino hacia ella y en cuanto nos vió se quedó paralizada, mirándonos, y su padre mirándola a ella y a nosotros de reojo, al llegar pareció salir de su trance
-Oye chicas lo siento, debería de haberoslo contando lo sé, pero...- sin dejarla decir más, las tres la abrazaron y Maddie soltó una bocanada de aire
-Te queremos, seas quien seas
-Y yo a vosotras- mirando a su padre de reojo le ví sonreir un poco, ese hombre me daba mucho respeto, mientras estaba despistado, Maddie se me abalanzó y me abrazó, yo también lo hice unos segundos después mientras notaba una mirada fija en mí
-Creo que tu padre me está mirando muy mal
-Me da igual, te he echado de menos- sonreí
-Y yo a ti- la apreté mas fuerte al igual que ella a mí, cuando se separó me sonrió y después miró a Declan, el cual estaba nervioso por tener a su padre tan cerca después de tantísimo tiempo, Maddie le abrazó y él a ella, pero estaba tenso, oí lo que ella le decía
-Relájate hermanito, no pasará nada
-Se lo tengo que decir, me siento culpable
-¡No, ni se te ocurra!- esto lo dijo más alto de la cuenta y su padre finalmente irrumpió en la conversación
-¿Pasa algo?- Declan tartamudeaba, era cómico, pero no podía reírme, ahora no
-Nada Edward- dijo Maddie cortante, me sorprendió ese tono, ni siquiera cuando me odiaba tanto lo había percibido en ella, y además, ¿Quién llama a su padre por su nombre?
-Madison...- ella le miró despectivamente y volvió a mirar a Declan- ¿Quiénes son?
-Unos amigos, dudo que te importen lo suficiente
-Pues sí, quiero saber quien se va a meter en la cama de mi hija hoy- eso dejó sin palabras hasta a la mismísima Maddie, ¡MADDIE!, ¡SIN PALABRAS!
-¡Hey no te pases!- saltó Declan inconscientemente, pero se dió cuenta luego, demasiado tarde
-¿¡Quién eres tú para hablarme así!?- él alzó la voz y todo el mundo se cayó, esto empezaba a ponerse mal, muy mal para mi amigo, así que, intervine, nada podía ir ya a peor
-Perdónele, está un poco loco... Ya sabe, los golpes en la cabeza son malos- oí como Maddie se aguantaba una carcajada y la miré con una sonrisa
-¿Y tú quién eres?
-Dylan Hunter, nadie importante, que pase buena noche- hice un amago de irme, pero Declan me frenó, ¡Imbécil!
-Parece mentira, tantos años buscándome y ni siquiera me recuerdas- el rey frunció el ceño confundido
-No seas tonto... Vamos- le susurré- todos están mirando
-Me da igual Dylan, estoy harto
-Sí, muy bien, pero no es el momento
-¡Guardias!- dijo él y cuatro tipos se acercaron
-¿¡Qué haces!?- gritó Maddie
-Encerrarlos, mañana los soltaré, cuando se hayan calmado
-¿¡Pretendes encerrar a tu propio hijo!?- su padre miró a Declan, agarrado ya por los guardias y yo por otros dos
-¿Declan?- Declan le miró desafiante, lo nunca visto en él, me sorprendía- ¡Soltádles!- nos soltaron y yo me recoloqué el traje, vaya bienvenida de mis cojones

El rey y Declan se fueron a otra habitación y Maddie nos llevó a los cuatro fuera de allí, a su habitación creo, eso era enorme, los techos altísimos y todo lleno de armarios, un vestidor, estanterías, cuadros, lujos y otras cosas, yo me quedé de pie y las tres chicas se sentaron en la cama mientras que Maddie seguía a mi lado

-Dios que fuerte- dijo Hannah- una de mis mejores amigas es la heredera al trono de Inglaterra
-Si, en alto suena más extraño todavía- dijo también Fede
-Chicas por favor- rió Maddie- dejádlo ya, no es para tanto
-Oye no te tires flores, princesita- me miró mal y luego se rió
-Vale quizás si lo sea, siento haberoslo dicho así de verdad, lo siento mucho, aún que bueno, técnicamente no os lo he dicho, lo habéis descubierto ahora al verme
-No pasa nada- intervino por fin Helen- habrá que quererte igual, supongo- Maddie la miró mal y luego a mí
-Tú y yo tenemos que hablar
-Nos vamos, no queremos molestaros- ese tono iba con segundas y Maddie lo notó
-Muy graciosas- dijo molesta, ellas se fueron dejándonos solos
-¿Qué pasa?, ¿Estás bien?
-No, no sé lo que le pasará a Declan ahora, es posible que no vuelva, ¿Eres consciente no?- lo pensé por unos segundos, la verdad es que no lo había pensado- Veo que no lo eras, puede que jamás regrese a Estados Unidos
-No...- dios, había sido muy tonto, no debería haber dejado que se acercarse a saludar, me senté en la cama- mierda...
-Haré lo que pueda para que vuelva contigo, ¿Vale?- asentí agradeciéndoselo, pero la puerta se abrió de repente
-¡Madison!- una voz fuerte inundó la habitación- ¿Qué es eso de que te marchas?- Maddie se sobresaltó y se puso un poco nerviosa- Acabo de pillar a los sirvientes cargando todas tus maletas en el coche para ir a aeropuerto, no puedes irte, te lo prohíbo
-¡No puedes hacerlo!, ¡Me largaré de este castillo y tú te quedarás sólo con tu Elena y tus nuevas hijitas!, Como siempre has querido y no me lo niegues
-Eso es mentira, si que me importas, eres mi hija, y como tal tienes que ocupar el trono en 3 meses- eso me impactó, ¿Cómo?, Me mintió, para eso quería la documentación falsa, dios, se aprovechó de mí, yo no le importaba una mierda
-¡No quiero la corona!
-¡Tienes que aceptarla!
-¡Si tanto te gusta sigue tú con tu cuento de hadas personal!
-¡No puedo Madison!, ¡Me estoy muriendo!

De repente todo estaba en silencio, el ambiente se cortaba con un cuchillo y yo no pintaba nada allí, pero el rey se fué y Maddie se desplomó en la cama, mirando a un punto fijo y a punto de derrumbarse

-Mi vida es una mierda
-Ya, bueno, me tengo que ir, buen viaje- se levantó de la cama y me frenó antes de que yo me fuera
-¡Dylan!, ¡Espera!, Lo siento, pero te mentí para...
-No me importa Maddie, me utilizaste, y no hay cosa más rastrera que eso, puede que yo no haga bien algunas cosas, pero jamás te he utilizado de esta forma
-Dylan...- se acercó rápidamente y me besó, sus lágrimas llegaron a mi boca y me separé de ella
-No Maddie, así no- con aquel beso me había dado cuenta de que lo que Declan decía era verdad, y mi corazón, mi barriga y todo mi cuerpo había saltado por dentro, pero me sentía demasiado traicionado, no me esperaba algo así y menos por ella, me fuí lo más rápido que pude de allí, y en cuanto encontré a Declan le dije que me iba y él me acompañó, fuimos a un bar no muy lejos de allí, donde había un gran ambiente, por la cantidad de gente que se aburría en aquella fiesta del castillo, todos borrachos
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LS ♀️

The PrincessDonde viven las historias. Descúbrelo ahora