Capitulo 4

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Foto:Helen
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Al día siguiente cuando me levanté hice lo mismo que el día anterior, asistí a las clases, conocí a gente nueva y todo bien, hasta la hora de la comida, ahí todo dió una vuelta inesperada

-¡Hey chicas!- me senté con mi bandeja y ellas me sonrieron
-Adivina que- dijo Fede, la miré para que siguiera hablando- Helen nos va a llevar a conocer Cleveland, hemos pensado en lo que dijistes ayer, y es verdad, esto es muy monótono, así que vamos a cambiar un poco el día- sonreí y en fin estuvimos hablando un rato sobre los detalles, hasta que pasó lo inesperado...

**********

-Y bueno, cuéntanos Helen, ¿Qué veremos?- ella sonrió
-Pues iremos al río, al centro comercial, a mi cafetería preferida...- de repente sentí algo frío por mi espalda y por mi cabeza, era batido de fresa, me giré y vi a la puta de la Barbie malibú con un vaso en la mano y riendo, detrás estaba el gilipollas de Dylan riéndose, respiré profundamente, aquella rubia artificial me había agotado la paciencia, se acabó, me levanté bruscamente con mi plato de sopa, la cuál estaba ardiendo y se la tiré por encima a la rubia, el gilipollas se dejó de reír, yo cogí mi bandeja, tirando al suelo todo lo que había en ella, y se la lancé a la cara antes de que pudiera cubrirse ni nada, y tuve buena puntería, ya que le di en un ojo, este se acercó a mí a paso rápido y me encaró
-¡Podrías haberme roto la nariz o dejarme ciego si me llega a dar en el ojo de lleno!- sonreí, estaba muy enfadado
-Ya bueno, una pena que no fuera así- me iba a gritar algo pero alguien irrumpió en la sala y todos los que estaban cuchicheando se callaron, giré la cabeza, la directora
-Ustedes dos, a mi despacho, ya
-Espere, ¿Y la rubia esa?
-La señorita Moore irá a la enfermería, luego hablaré con ella- se giró y miré al subnormal
-Pero mira que eres gilipollas- le miré con desprecio y fuí detrás de la directora, oí un suspiro y después unos pasos que me seguían

Entramos al despacho, el mismo en el que anteriormente había estado, la señora nos esperaba en la silla, yo seguía manchada de batido y a Dylan le habían dado hielo para el ojo, el cuál se estaba hinchando y no pude reprimir una sonrisa por mi puntería, nos sentamos en las dos sillas que había en frente de la mesa y ella empezó a hablar

-Es su segundo día aquí, y ya han causado problemas, señor Hunter, esperaba que este año asentase la cabeza debido al gran desastre del año pasado y señorita Townsen, usted vino aquí para alejarse de sus problemas, no para crear más, estoy muy decepcionada con ambos
-Pero empezaron ellos
-Si y usted terminó, por lo poco que sé, usted vino aquí para cambiar y dejar atrás los errores del pasado
-O no perdone, vine aquí por obligación, si por mí fuera créame, no estaría aquí, no habría puesto un puto pie en este continente, y no me sermonée como si fuera mi padre
-¡Señorita!¿Sabe usted con quién habla?- se la veía enfadada
-Perdón- la verdad es que no lo sentía, pero si así estaba más contenta
-El caso es que los dos estarán castigados, colocarán la biblioteca durante dos semanas, juntos, de 15:30 a 17:00, seré más benévola por ser la primera vez, pero ni una más- nos miramos
-Eso no es justo directora- dijo Dylan
-Pueden irse- ambos nos levantamos molestos y sin dirigirnos la palabra cada uno tomó su camino, entré en mi habitación y me duché para quitarme esa guarrada del pelo, al salir estaban todas en mi cama
-¿Qué ha pasado?
-¿Te han castigado?- las miré mientras me secaba el pelo
-Sí, tendré que aguantar al imbécil dos semanas colocando libros
-Joder, pues entonces no tendrás las tardes libres
-El castigo termina a las 5 así que tendré tiempo libre
-Si, pero en cuanto empecemos los exámenes tendrás que pasarte todo el día estudiando y tendrás sólo media hora para comer, casi no podremos ni hablar
-Dios... No había pensado en los exámenes...- me di con la mano en la frente y me desplomé en la cama entre todas ellas
-Bueno, de momento vístete- dijo Hannah feliz, yo la miré sin saber a que se refería, y ella me leyó la mente- iremos a conocer Cleveland, ¿Te acuerdas?
-Es verdad..., Iré a prepararme- miré la hora en el móvil, las 4, tenía una hora para prepararme, las miré, todas iban muy monas, así que decidí que yo también iría mona

The PrincessDonde viven las historias. Descúbrelo ahora