Para su desgracia, la dichosa fiesta de Lucky Sports había tenido lugar un jueves por la noche, por lo que eso significaba una cosa: había que ir a trabajar temprano. ¡Wow, qué emoción!
Do Kyungsoo se hallaba, a la espera de la muerte, tirado sobre su escritorio mientras el café se enfriaba. Incluso podía apostar que los buitres estarían volando sobre el edificio para hacer tiempo hasta llevarse su cadáver.
¡Menuda noche la de anoche! Por poco y la naciente carrera de Oh Sehun se acababa pero habían sorteado los obstáculos con éxito aunque, a cambio, él y Jongin tuvieron un ligero intercambio de fluidos salivales, músculos linguales y manoseos inadecuados. ¡Vaya forma de celebrar su décimo aniversario de rivalidad!
Pero ambos sabían que no existían muchas opciones, al menos, no en ese momento, y seguramente volverían a repetirlo si con eso evitaban a la molesta Joy. ¡Cierto! Tenía que ocuparse de ella; lástima que su cabeza dolía como el infierno y afrontaría una reunión en media hora que seguramente se extendería por horas, así que la operación "Encargarse de ella" quedaría en pausa hasta que fuera capaz de decir el alfabeto de corrido sin sentir la necesidad de sufrir una sobredosis de ibuprofeno, paracetamol o cualquier fármaco de venta libre.
"Anotación mental: no realizar fiestas de la compañía en días de semana. Ser más humanos con los empleados de otras empresas."
-¡Realmente perdiste la cabeza! -la odiosa voz de Kim Junmyeon hizo aparición- ¡¿Sabes cuántas llamadas recibí a mi teléfono personal?! - "Dios, haz que el sol le derrita la cara, por favor" pensó a la par que el secretario estrellaba miles de revistas y diarios contra el mueble- Do Kyungsoo, respétame que soy tu mayor.
-Y yo soy tu jefe, el mismo que deposita tu abultado sueldo en tu cuenta bancaria -mencionó sin mucha emoción-. Ya te conté por qué tuve que hacerlo -le dio un sorbo a su bebida y observó los titulares que postulaban un amorío fogoso con Kim Jongin-; era obvio que saldrían estos rumores pero no hay fotos o grabaciones. Así que deja de quejarte, ya me encargué de todo -confirmó muy satisfecho-.
-¡Claro! Debí imaginarlo-se carcajeó con desgano-. Pero es mi culpa por pensar que ibas a tratar el tema seriamente.
-¿Qué estás insinuando? -su expresión se endureció- ¡Dilo, Kim Junmyeon!
-Cuando dijiste anoche que ibas a hacerte cargo supuse que darías un comunicado oficial, un audio o al menos un mensaje de texto adecuado pero ¿en serio, Do Kyungsoo? -sacó su teléfono para buscar las capturas que los periodistas habían enviado-. "Sin comentarios ", "No hablo español" y "The cat is on the table" no están ni remotamente cerca de "hacerse cargo".
-Tú tienes tu método y yo el mío, no veo problema en eso -explicó como si fuera muy obvio-.
-Kyungsoo, la única razón por la cual no suenan todos los teléfonos de mi oficina es porque arranque los cables con la esperanza de ahorcarte con ellos.
-Bueno -sonrió-, no veo esos cables por aquí -recogió el reguero que el mayor dejó en su escritorio y se lo ofreció-. Regálalas al personal o ponlas para reciclaje.
-Por lo menos dime qué planeas hacer.
-Ir a la reunión - se burló sin reservas-. Junmyeon, tranquilo, déjalos hablar. Si quieren pensar que duermo con Kim, bien por ellos; a mí no me afecta. En todo caso, será KJI la que tiene el problema -su tono denotaba su tranquilidad-. No es como si nadie supiera que Jongin es indiferente al género pero todas sus relaciones públicas fueron con mujeres -arregló su traje para irse-.
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Modelando tu odio (Kaisoo/Sookai)
HumorKim Jongin es afortunado como pocos; tiene una carrera de modelo exitosa y su propia agencia, KJI Models. Sin embargo, aun no logra vencer a su rival de toda la vida, Do Kyungsoo. Pero un encuentro con un trabajador de oficina que tiene todo lo nec...