Mommy (+18)

Capitulo 5

Toco la puerta antes de entrar y me dice que pase, me señala el lado de su cama donde me puedo sentar, es enorme, me dice que estuvo buscando películas nuevas que trataran de romance y puso la primera que ha visto con buenos comentarios.

- Te ves bien -dice poniendole play a la película.

- Oh... gracias -susurro estirando un poco mis mangas, siento que mis orejas arden.

- Estas roja... -me dice en un tono bajo, su mano acaricia mi pierna-. Tranquila -siento un escalofrió en todo mi cuerpo, es agradable-. Ya empezó la película.

Dice sin más y separa su mano de mi pierna, pasa con tranquilidad hasta que voy centrando más en la trama, ya emocionada de pensar en la boda y todo lo que estan preparando para estar juntos después de tantos problemas, pero, como la vida es una porquería todo se arruina en el peor momento, el final.

La novia muere en un accidente porque su suegra la corto los frenos del carro al que diría para llegar a la boda, así que yo estoy aquí, hecha pedazos, llorando sin parar como una niña con la rodilla raspada, mientras Marian trata de consolarme.

- Es que... tenían que casarse -y ahí van mis lagrimas.

- Si, linda, es triste pero en un futuro cuando el muera estarán juntos de nuevo -eso me tranquiliza un poco, con el pasar de los minutos me voy dando cuenta que tengo apoyada mi cabeza en sus pechos mientras la abrazo y ella a mi.

- Me veo como una tonta, ¿verdad? -pregunto separándome un poco para verla, quiero saber si se esta riendo de mí.

- Claro que no -su gesto es serio, apoya sus manos en mis mejillas y las seca-. Te ves tierna.

- ¿De verdad? -ella afirma con la cabeza y me da un beso en la frente, pero yo no quiero eso.

Cuando baja su rostro, muerdo mi labio, luchando internamente conmigo por lo que voy hacer,  estoy pensando bien, pongo mis manos en los hombros de la señora Marian y me tiro sobre ella haciendo que quede acostada en la cama.

- ¿Qué ocurre? -sé que lo sabe, sabe lo que voy a hacer, porque no me detiene, no puedo detenerme sola-. Solo hazlo -su tono es lento, bajo, siento como si me recorriera el cuerpo y la beso.

Pero me separo tras unos segundos, no quiero que ella me vea como una niña loca, nunca me había preocupado besar a alguien, pero siento que algo malo podría pasar si sigo así.

- L...lo siento -me quito de su cintura-. Yo... buenas noches -digo rápido para correr al cuarto y encerrarme bajo las cobijas-. Que tonta soy.