Capitulo 1

81.2K 2K 385
                                    

He agarrado mis cosas, no todas, un par de blusas, pantalones calientes y mi abrigo más grueso, no quiero estar en mi casa por un tiempo, espero llevar ropa suficiente hasta que se calmen las cosas, debo entrar a clase en dos semanas y estoy en problemas, mi madre a quemado mis cuadernos y mi mochila la hizo pedazos, pero estoy hablando y dudo que se entienda.

Tengo un pequeño problema, no me gustan las personas de mi edad, ni años cercanos, siempre son diez años mayores como mínimo, no me malinterpreten, no las elijo yo, simplemente empiezo a hablarles hasta que me doy cuentas de su edad, pero siempre me doy cuenta cuando ya me gustan, tal vez eso no molestaría a mi madre si fueran hombres, pero no es así, me gustan las mujeres, así que ella esta bastante decepcionada, molesta, sumamente estresada.

A todo esto, dirían como me atreví a decirle si ni siquiera tenía donde ir quedarme, pero yo no se lo dije, estuve trabajando en una soda durante la época de temporal, siempre me quedo ayudando a mi jefa a ordenar la soda cuando todos se van, pero anoche terminamos muy tarde y la lluvia estaba muy fuerte así que me quede a esperar a que cesara.

Y por esperar me refiero a tratar de hacer algo por mi vida, llevaba varias semanas trabajando para la señora Ana, mi jefa, me encanta, es alta, delgada y su cabello negro siempre esta peinado con rizos, a veces incluso viene con un rulo pegado en la cabeza, en la parte de atrás, lo mismo paso anoche, pero ese día había sido estresante y no lo note hasta que estuvimos solas.

Se lo quite despacio para no jalar de su cabello y me agradeció un poco apenada, por su descuido, cuando volteo hacia mi yo salte para sentarme en una de las mesas y la bese, me dijo que yo no podía hacer eso, le hice carita de perro diciéndole que no quería hacer nada malo, solo quería besarla, hasta que la logre convencer y me dejo besarla, pero sus besos eran diferentes a cualquiera que haya dado antes, sus manos estaban en mi cabello y me pegaba a sus labios con ansiedad que yo respondía, nunca me habían besado de esa manera, me estaba gustando tanto que no escuche cuando sonó el timbre de la puerta.

MI madre había llegado a recogerme para irnos en el carro, así que nos vio, me agarro del cabello y le dijo a la señora Ana que si la veía cerca de mí la demandaría por abuso infantil y no sé que estupideces más, me tiro dentro del carro y nos fuimos, hablando y hablando de que estaba loca por seguirle el beso a una mujer, a una mujer que me doblaba la edad, que iríamos a la iglesia el domingo y le pediría al padre orar por mí.

Trate de dormir cuando llegamos a casa pero no dejo de hablar y hablar hasta la madrugada, le pedí miles de disculpas a la señora Ana por la actitud de mi madre, ella me dijo que no tenía de que preocuparme, que me entregaría mi paga el día indicado en el banco, pero no puedo volver a verla ni ir a trabajar.

Al despertar, hoy, vi mi mochila hecha pedazos en el suelo, un par de cuadernos despedazados, corría hacia el cuarto de mi madre y le pregunte que me había hecho el resto de cosas, estaba revisando algo en su computadora y solo me dijo.

- Las queme, no vas a tener nada que hayas comprado con el dinero de esa lesbiana, ahora sal de mi cuarto, no quiero ni verte la cara, hasta el domingo cuando te limpien me vas a dar una explicación clara.

- ¿Qué? -me atreví a preguntar tratando de sonar tranquila, cruzando mis brazos y tragando grueso-. ¿Ahora te doy asco?

No me respondió y me fui molesta, me bañe y ahora es esto lo que ha pasado, tomo mi mochila y camino hacia la salida.

- Te juro que te dejo calva si me entero que vas a buscarla -escucho desde su cuarto, apenas abro la puerta.

- ¡Lo que quieres es que me muera! -grito furiosa y tiro la puerta antes de irme corriendo, no sé donde voy, no me interesa.

Con un poco de suerte me muero de hambre, así será feliz

Mommy (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora