🥀 [Tu Me Perteneces] (Omegaverse)

Capítulo 3

Él chico se estremeció demasiado, un escalofrío se hizo presente en todo su cuerpo y ni de que hablar de sus nervios, eso era peor. Maldecía en su mente de donde podría estar Chastiefol en este momento.

- ¿Por que no has venido a dormir? - susurro en el oido del “menor”, su olor era cada vez mas fuerte

- Por que...por que...yo...¡Tengo derecho a dormir a otra parte! - cruzo de brazos intentando sonar valiente, pero creo que eso es algo imposible por que de sus labios noto una risa escapada, cosa que a su parecer era un poco burlesco de su parte - ¡Y deja de estar muy cerca de mi idiota! - voltee mi rostro para encararlo.

Aquellos ojos rojos de Ban brillaban con mucha fuerza mientras miraba a directamente al rostro del Rey hada que se encontraba tímidamente mal. Su rostro estaba súper sonrojado y ni que hablar de su olor a flores , estaba tambien empezando a  mezclarse con el olor a canela de Ban.

- Vamos a dormir - Su tono era dominante y frio, cosa que hizo intimidar mas a King al igual que su sonrojo aumentaba.

- Yo...no te tengo que hacer caso - soltó de frente, pero para después solo arrepentirse. Tenía en claro que si seguia rehusando, Ban iba a utilizar recursos mas fuentes.

- ¡Te dije que vayamos a dormir! - el olor a Ban ya era fuerte. King solamente se asusto de inmediato y con su mirada baja asiente. Sintió unas manos agarrando su cintura y elevándolo, para después terminar en él hombro de Ban como si fuera un sacó de papas.

Él oji-miel temblaba y su olor a flores se hacia mas fuerte, era un indefenso omega y él solo un dominante alfa. Esto era lo peor que podía imaginarse King. El oji-rojo lo llevo cargando a su habitación compartida de los dos. Abrió la puerta de un golpe al igual la cerro y dejo a King en la cama con su mirada tan inocente.

Se relamio los labios dejando ver a sus dientes caminos mientras que sus ojos solamente se enfocaban a ver a su inocente presa que lo miraba con un rostro sonrojado y avergonzado - ese rostro le gustaba Ban, que se viera King un niño asustado, uno avergonzado, uno sonrojado y obviamente inocente. Las suplicas que King le decía en ese momento solamente hacian exitar mas y mas al albino, pero...solamente al verlo sentía ¿Lastima? En realidad no lo sabia, pero al verlo también sentía una necesidad de no hacerlo por que una parte de él le decía que le iba a afectar demasiado. Una lucha de unos minutos con la conciencia, Ban, se acuesta a lado de el.

- Ban por favor - volvio a suplicar el castaño.

- Callate y cierra la boca enano tonto - se acerco a el y lo abrazo por detrás de su cintura apegandolo a el -

- Deja.¡Dejame! - intentaba soltarse pero simplemente no podía.

- ¡Callate! King, si sigues gritando no me controlaré y juro que te violare ahora mismo aunque tu no quieras - duras y directas palabras pero realmente ciertas.
.h
King no dijo nada, solamente se quedo callado.

- ❤ -

Era un nuevo día y todos los pecados ya se habían levantado  - incluyendo a Hawk y a la princesa - pero...creo que no todos, mas bien unos dos pecados aun seguían durmiendo con mucha tranquilidad.

Ban abrió los ojos lentamente - luego se volteo a ver a su acompañante que estaba...algo... ¿Mal?

- Oh no...que diablos e echo anoche.. - pensaba Ban. Volvió a mirar a King dormido con una mirada relajada y dulce, pero su mirada cambia al verlo.

King se encontraba con el rostro super rojo y respiración era super rápida, claramente ya se sabia que tenía, pero Ban no lograba comprenderlo, sinceramente era eso imposible.. ¡Como un hada podía enfermarse! ¡No lo podía! ¡Las hadas no se enferman nunca!

- Ahh tiene fiebre - salio rápidamente de la cama, corriendo bajaba las escaleras y vio a todos los pecados, a hawk y a la princesa.

- ¡Ban! ¡Haste que te dignas a aparecer! - dijo Meliodas mientras lavaba algunos tarros.

Era domingo y la taberna no abría.

- Señor Ban... ¿Y el señor King? - pregunto Elizabeth algo preocupada.

- Es lo que trato de decir! - grito irritado - ¡Esta ardiendo en fiebre!

- ¡Imposible! ¡Las hadas no enferman! - Dijo Diane.

- Eso es lo que pensé - Declaró Ban -  Encerio ayudenme

- ¿Tu por que lo quieres ayudar? - pregunto Diane con una risilla en sus labios.

- Por que a Ban le gusta King - dijo en su forma neutral de siempre Gowther -.

- ¡Ahora si que te mato Gowther!