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Jueves 19 de junio de 2008.
Durante este último tiempo he estado viviendo con un nudo en la garganta, deseando que no llegue el día en el que me preguntes quién soy, el día en que me mires como si fuese un completo desconocido y me alejes de ti porque a pesar de que hemos recibido ayuda para enfrentar todo lo que nos espera como familia, nadie me ha preparado para que me olvides.
Para que olvides todo lo que hemos vivido.
Pero la enfermedad va en aumento y no podemos frenarla.
Te estoy perdiendo y mi corazón se rompe lenta y dolorosamente cada segundo que pasa.
Estos meses has sufrido un importante deterioro de la memoria, ya no logras darte cuenta de lo que pasa a tu alrededor, el sufrimiento no es tuyo, es mío y de nuestros hijos pero ¿Sabes? Estoy dispuesto a sufrir mientras te tenga a mi lado.
Como familia y con tu aprobación hemos decidido buscar ayuda ya que también estoy viejo, no puedo cuidarte como quisiera y me desespera no poder hacerlo.
Hemos contratado a un chico, Lee Chan, te agrada, a veces piensas que es tu hijo y él solo sonríe y continúa con sus obligaciones, te ayuda en el baño en las mañanas y también con los medicamentos que te ha recetado el doctor, es muy respetuoso y responsable.
También he buscado información por mi lado, pidiendo libros en la biblioteca de la ciudad y utilizando el internet, aprendí a usarlo con la ayuda de SunHee pero después de poner la pantalla en color negro me he quedado con los libros.
A medida que avanza la enfermedad me di cuenta que estoy perdiendo el cerebro de una gran persona pero no a ti, no puedo cuidar tu cerebro pero te puedo cuidar a ti y saberlo me ha entregado la calma que tanto necesitaba.
Pero hoy...
Hoy me has hecho esa pregunta que tanto evité.
Escuché los gritos que no quería escuchar.
Recibí los golpes que no querían que tocasen mi pecho.
Y esa mirada de espanto al despertar a tu lado.
Hoy me di cuenta de que te habías ido sin mí.
Con amor, tu SeungCheol.
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