~Tres días sin ti~ (Completa)

Capítulo 11

Los jinetes, los Defensores del Ala y las Doncellas Aladas ya se encontraban en aguas Berserkes, lo que significaba que era hora de separarse y empezar lo planeado. Mala y sus compañeros iban al frente junto con Atala y las demás pero ellas estaban dentro de los barcos para dar comienzo a un ataque sorpresa; Eret, Bocón y Valka los acompañaban por si las cosas se complicaban en un momento. Los chicos cortaron camino por una cueva que quedaba en la parte oeste de la isla lo que ayudaría a llegar mas rápido al calabozo.

Patapez – ¿ustedes como creen que se encuentre Astrid? – preguntó preocupado rompiendo el silencio.

Heather – obviamente bien – contestó ofendida – ella es una guerrera –.

Patapez – que tal si la encontramos golpeada o si la torturaron o... – no acabo de decir mas posibilidades por lo asustado que estaba.

Hipo – no digas tonterías , yo le advertí muy claramente a Drago que si le hacia algo yo mismo lo mataría – dijo enojado.

Heather – pero el el Drago, se nota que puede hacer lo que sea – concluyó.

Los gemelos – JAJAJAJAJAJAJA –.

Patán – ¿de que se ríen? – pregunto serio.

Brutilda – por favor la última vez ese inútil no pudo con nosotros – habló con tono burlón.

Brutacio – aparte nosotros somos nosotros – señalo a todos con tus brazos extendidos.

Heather – tienen un buen punto – comentó.

Patapez – pero aun así el es mas inteligente, astuto y sabe sobre nuestros movimientos –.

Hipo – no tanto como crees Patapez, ni siquiera sabe lo que le espera – dijo desafiante.

Patán – NOS ACERCAMOS – aviso de un grito.

Hipo – pero no grites – el pelinegro simplemente sonrió – separense y recuerden, no hagan mucho ruido –.

Mientras ellos se separaban del otro lado Mala, Atala y su gente ya se encontraban en batalla; la mayoría de los soldados de Drago de igual manera se encontraban luchando e iba todo en orden. Valka, Bocón y Eret ayudaban mucho con las flechas gracias a las asombrosas armaduras y de vez en cuando atacaban con una muy buena coordinación entre los tres.

En el oeste...

Patán y los gemelos se dirigieron en los costados del salón, ya que, ahí se encontraba en hombre de capa de piel de dragón; Heather y Patapez fueron con los arqueros y catapultas; Hipo se dirigió al calabozo. En el camino tuvo que derribar uno que otro guardia, uno de ellos tenia las llaves y se las quitó de su cinturón. Al entrar el muchacho empezó q llamar a la rubia.

Hipo – ¡ASTRID! ¡ASTRID! ¡¿Dónde estás?! –.

La chica de ojos azules escucho su nombre, al principio creyó que esta una ilusión pero al escucharla mas cerca se dio cuenta que esa voz provenía de Hipo.

Astrid – ¡Hipo por aquí! – su voz apenas se escuchaba por culpa del cansancio que la acompañaba. Sin embargo, fue lo suficiente para que él joven se dirigiera a la celda donde se encontraba la chica.

En el momento que llegó rápidamente abrió la puerta dividida por rejas de metal algo oxidadas, corrió hacia ella para abrazarla con fuerza. Mientras se daba el conmovedor encuentro Chimuelo fue a liberar a Tormenta, la cuál, estaba  ataca por cadenas fácil de romper por un ataque de plasma de nuestro amado furia nocturna.

Astrid –  te extrañe – unas cuantas lágrimas caían por sus mejillas.

Hipo – yo también te extrañe – se separo del abrazo y la beso apasionadamente tomándola por la barbilla, luego se separo – ¿Creíste que te iba a dejar aquí? –.

Astrud decidió no contestar nada y solamente lo beso rápido para abrazarlo de nuevo.

Astrid – te amo mi chico dragón – susurro en el oído de su prometido.

Hipo – te amo mi lady – de igual manera le susurro en el oído de su prometida. Tardaron unos minutos abrazándose hasta que Chimuelo le dúo un ligero golpe en la espalda con la intensión de irse.

Hipo – Astrid es hora de irnos – la rubia apenas tenía fuerzas para levantarse, al darse cuenta Hipo la ayudó cargándola, se dirigió a Tormenta para subirla a su lomo.

Astrid – muy bien, hagamos esto, Tormenta vámonos –.

Ambos se dirigieron rápidamente a la saluda del calabozo, sin embargo, al salir los guardias los tomaron por sorpresa disparándoles flechas, rocas y redes. En un disparo de uno de los guardias una red alcanzo a Hipo y Chimuelo provocando que calleran.

Drago – esta vez si me impresionaste – salio de la nada – una distracción mientras tu vas por tu chica y luego me destruyes ja y pensar que te subestimaba – empezó a caminar alrededor de ellos.

Hipo – ¿no sabes lo que estas haciendo? –.

Drago – CLARO QUE LO SÉ. La verdadera pregunta es, ¿que estas haciendo tú? – lo señalo con su lanza.

Hipo – pues sabes que, lo que estoy haciendo es tratar de acabar con un lunático que sólo hace preguntas estúpidas y yo quedándome como idiota a contestarlas, como la vez – contestó sarcástico y desinteresado.

Drago – de verdad que ya me canse de ti , ¡ACABEN CON ÉL! – sin pensarlo todos los guardias apuntaron hacia Hipo y Chimuelo.

Astrid – ¡HIPO! ¡NOOOO! – gritó asustada.

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Hola chicos :)

Por fin actualice, ufff ya me siento mucho mejor :3 Como siempre gracias por leer.

Que les pareció el nuevo capítulo? Mas intenso verdad jeje

Nos leemos luego

Bye🙌