Minnie//Yoonmin

XX

Jimin sabe que sus amigos no han dejado de mirarlo fijamente. Se ha puesto su pijama de dinosaurio y se ha abrazado de su Chimmy.

Su mente ha estado repitiendo cada segundo de aquella cita intentando buscar algo que haya impedido que el precioso chico gatito lo besara. Pero no hay nada. El chico gatito simplemente no quiso besarlo.

—¿Ya nos vas a contar como estuvo tu cita, Jiminie?—pregunta Jungkook sentándose a su lado. El pequeño rubio se gira a verlo mientras siente como las lágrimas se juntan en sus ojitos.—¿Qué tienes, Jimin?—pregunta su amigo mientras lo jala dulcemente hacia él para poder abrazarlo. 

—¿Crees que soy bonito, Jungkookie?—la pregunta toma por sorpresa al castaño quién no duda en dar una respuesta afirmativa.—¿Soy lo suficientemente bonito como para ser besado?

—¡Claro que lo eres, Jimin-ssi!—exclama Yugyeom mientras se acerca al sofá dónde su novio y Jimin se encuentran sentados. Se inca enfrente del rubio quién se limpia las lágrimas con su pijama.—Yoongi es un imbécil por no haberte besado.  

—O quizá no se sentía preparado para hacerlo.—interrumpe Jungkook, saliendo en defensa del pelinegro.—Quizá le dio miedo tu posible reacción y por eso decidió no besarte. No te atormentes. 

—Pero era el momento perfecto para el beso.—solloza el rubio mientras aprieta su peluche contra su pecho.—Era justo como yo siempre soñé que sería mi primer beso. 

—Awww Jiminie eso es tan...¿No has dado tu primer beso?—cuestiona Yugyeom un poco sorprendido. Observa al rubio negar con su cabecita y no puede evitar sonreír dulcemente.—Con más razón deberías esperar. Ya llegará alguien digno de ser tu primer beso. 

—Quiero que Yoongi hyung sea mi primer beso.—confiesa con un puchero en los labios.

—Bueno, si ese es tu deseo, quizá debas ser un poco más paciente.—comenta Jungkook dulcemente.—Yoongi hyung no parece ser el tipo de chico que besa a todo el mundo. 

Jimin se deja caer en el respaldo del sofá mientras patalea. No quiere esperar a que el chico gatito se decida a besarlo. ¡Pueden pasar siglos para que eso pase!

Quiere besitos del chico gatito, ahora.