Amor Prohibido 1

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Despierto unos minutos después, y noto que la bocina dice lo siguiente:
-Señores pasajeros, su vuelo esta apuntó de terminar, por favor abrochese los cinturones en el despegue- Dice la voz del piloto, y obedezco a las indicaciones.
El avión comienza a descender, esto se siente raro, mi estomago comienza a dar vueltas por si mismo, es una sensación divertida. El avión cae al suelo y frena, la sensación se va. Noto que el aire de la CDMX es muy sucio, esta contaminado sin duda, oh si es verdad, lo olvide; es la capital sin duda del país, uno de los mas contaminados del mundo, aunque el primer lugar se lo lleva china claro.
-Vamos Kang, es hora de bajar- Dice mi madre quitándose el cinturón.
-Si claro madre- Contestó haciendo lo mismo.

El aeropuerto es enorme, tiene enormes vidrios de pared, y todo es blanco, sin duda es el mejor aeropuerto que he visto, o mas bien el primero que llama mi atención, a lo lejos hay una tiendita de donas, una cafetería y de mas. Caminamos hacia la salida, y esperamos un taxi, para que nos lleve a la nueva casa.
-Hasle la señal a ese Kang- Señala mi madre un taxi rosa con blanco, me gustan sus colores, pero son muy afeminados.
-Si, claro madre- Hago la parada al taxi rosa, y de un momento a otro de detiene.
-Vamos para la zona rosa, ¿cree podernos llevar?- Dice mi madre amablemente con una sonrisa, el señor asiente y abre la cajuela, subo al taxi, este vuele mejor que el de mi estado, mi mente piensa un momento, es diferente el ambiente de aqui, me gusta.
Después de subir las maletas del taxi nos dirigimos a la avenida. Un enorme ángel de oro nos da la bienvenida, el Ángel de la independencia, pues claro, uno de los monumentos mas importantes del país y que solo que encuentra aqui.
A unos cuantos kilómetros, varia gente en una tipo marcha detiene el tráfico, ¿que es?, mi mente se pregunta a si misma, logro ver personas de su mismo sexo besándose, es una marcha de la comunidad LGBT,me sorprende, nunca antes había visto una, no tengo en contra de esa comunidad, la respeto, pero creo a veces que son muy expresivos.
-Vaya, un montón de maricones y travestís- Mi madre me dice con sarcasmo. A ella no le gusta ese tipo de personas, según ella no viene en la biblia y lo cree como pecado, o eso le dan a entender.
-Mama, un poco de respeto, solo salen a marchar o a festejar como un día cualquiera y normal- Contestó nervioso, no tiene porque insultarlos.
-Perdon, si tienes razón hijo- Me mira, y el taxi comienza a avanzar. Kilómetros después estamos en zona rosa, un lugar para la gente rica o millonaria, nosotros no somos gente de billetes, pero si tenemos algo de dinero y sin duda mi madre gasto su último centavo en una casa de lujo, aveces me frustro de poderla ayudar, pero pronto empezare a trabajar y todo lo que me dio se lo devolveré algún día.

-Señora Mendez- Un señor saluda a mi madre, creo que es el vendedor.
-Buenos días, señor Velazquez- Asiente mi madre, y el señor le entrega las llaves de la casa, ahora que recuerdo ni la he volteado a ver. Volteo la mirada hacia arriba y una casa grande nos saluda. Es increíble, su color coral por fuera sin duda es la mejor.
-Muchas gracias, que tenga buen fin de semana- Mi madre se despide del señor el cual se va tranquilamente como un hombre de negocios.
-¿Listo?- Pregunta mi madre divertida.
-Claro- Asiento y sonrió. Ambos abrimos la puerta de madera gigante, y una sala beige nos recibe.
-¡WOW!- Me sorprende. Es tan grande y cómodo, hay mesitas de decoración blancas y un juego de tapetes cafés, esto es tan de lujo.
-¿Te gusta Kang?-
-Me encanta madre, gracias- Me dirijo a ella, sin duda es el mejor hogar. Caminamos unos pasos a un pasillo que esta de el lado derecho y una cocina blanca con café me asombra aun mas, es gigante, la estufa, el refrigerador, el lavaplatos, todo es tan increíble y elegante, regresamos y subimos las escaleras cafés, y nos encontramos con un pasillo blanco con verde esmeralda , hay tres puertas de madera solida. Supongo que dos son los cuartos y uno es el baño.
-¡Eligo la grande!- Grita mi madre y entra a la puerta mas ancha que es la de lado derecho. Una habitación fría y de color rosa pastel nos da una impresión, un gran ventanal no se queda atrás.
-Iré haber la otra habitamaotro , ya Camino a la puerta de madera fría, la abro y encuentro un cuarto muy acogedor, también hay un ventanal, el cuarto es azul...Malditos estereotipos de genero, el azul casi no me gusta, opto mas por el morado, mi color favorito.
Camino por la habitación, no es tan fría como el de mi madre, es chico, pero me gusta.
-Oh vaya...Mira eso- Mi madre entra al cuarto y me toma de los hombros sonriendome.
-Es increible- Mi voz suena aguda.
-¿Que tienes?-
-Nada...- Miento, pero mi madre me conoce mas que nadie.
-Kang...Algo tienes, ¿que pasa?-
-Es solo que...- Me detengo y pienso en lo que dire, realmente extraño la casa de Guanajuato, es mas...Cálida, aunque es vieja, hubo muchos recuerdos ahí, no podría acostumbrarme a estar aqui, es algo nuevo.
-Me es difícil cambiar de vida-
-Lose, cariño todo saldrá bien-
-Vale...Oh por cierto, de seguro ya tienes una preparatoria para mi ¿No?- Había olvidado eso, estoy en el penúltimo semestre, no quiero desperdiciarlo.
-Claro, es una de esas preparatorias de paga-
-Espera, ¿que?-
-¿Pasa algo?-
-¿Hablas enserio?- Me desconcertó, una preparatoria de paga, una cara.
-Si, hay que aprovechar el dinero que dejo tu padre en algo bueno-
-Tienes razón, pero me entusiasmo ya que en dos días inician las semestres, ¿me llevaras para conocer el camino?-
-Si Kang, no te preocupes y...aparte tengo tu uniforme ya, solo deja que llegue el camión de la mudanza, te encantará- A los pocos segundos de decir eso, el camión de mudanza llega.
-Hablando del rey de Roma...- Hablamos al mismo tiempo y sonreímos. Sin duda tengo la mejor comunicación y confianza con ella. Amo a mi madre.
-Vamos, tenemos que desempacar- Bajamos y empezamos a bajar todo del camión.

-Aqui esta- Entra mi madre después de desempacar sus cosas en si cuarto, entra con una bolsa negra y lleva junto con ella un logró, de seguro es el uniforme de la preparatoria.
-¿Es el uniforme?-
-Asi es- Abre la bolsa, y sale un saco negro y un pantalón negro, una camisa blanca y una corbata negra, al parecer a la escuela le gusta el negro.
-Oh, me gusta mucho- Digo asombrado, me gusta, no había tenido mejor uniforme que este.
-¿Enserio?, me alegra de que te guste, y ¿Sabes que?...No esperaba dártelo hasta mañana, pero...Toma- Me estira la mano con una caja envuelta, no tengo idea de que sera, pero me emocionó, ya que amo los regalos, retiro el papel verde de la caja y es...¡El Samsung Note Nueve!.
-¡Oh mama!- Grito.
-¡¿Te gusta?!-
-Me encanta, muchas gracias- La abrazo, esta mujer a dado mucho por mi.
-No hay de que Kang, lo cuidas mucho, espero que sepas valorar las cosas que te doy-
-Si claro madre, eso tenlo por seguro- Le sonrió, me besa el pelo y se va. Prendo el celular, y un instructivo virtual me recibe, ¿que hare con esto?, ahora que recuerdo no se usarlo muy bien, supongo que mañana vendrán a poner la red de internet. Mis emociones se cruzan entre si, alegría, emoción y entusiasmo me devoran por completo.

Ya es domingo por la noche, y las clases inician mañana, estoy emocionado, pero a la vez siento un miedo terrible, no conozco a nadie y menos la preparatoria.
Dejo el celular por un rato en la mesita de noche y hagarro una de mis novelas favoritas IT me encanta ese libro...

Ojos cafés, pelo ondulado, tiene una sonrisa muy adictiva, me mira y me apenó, se acerca a mi, me toma de la cintura, toma mi cara con su mano izquierda y la acerca a sus labios...

Despierto desconcertado, me he quedado dormido, ¡mierda!, miro el reloj del celular, apenas serán las cinco y media de la mañana, ya no alcanza para dormir, quitó el libro de mi mano y pongo a cargar rápido el celular.
Me dirijo al baño para ducharme, me miro al espejo y recuerdo ese extraño sueño, un hombre, sin duda un hombre quería besarme en mis sueños, se parece al tipo que me tope hace dos días, ahg que incrédulo.
Olvido ese asunto y me desvisto, abro la regadera y vuelvo a pensar en lo mismo.

-¿Llevas todo?- Me pregunta mi madre.
-Si, incluso llevo la hoja de loa salones- No se ninguno, ayer tuve que imprimir un mapa de la preparatoria.
-Bueno, cuidate-
-Tu igual madre- Le sonrió y camino a la institución, no es como mi antigua preparatoria que parecía una escuela o un jardín de niños, esta esta cerrada, parece biblioteca.
Entró en la puerta principal y hay varios salones, escaleras y alumnos, me mareo al ver la situación. Pero ¿Que...?, un elevador aparece, dos chicos han bajado a la planta baja, o eso pienso, ¿cuantos pisos tiene esto?. Miro a mi alrededor, A1, A2, A3...Son los salones. Miro mi hoja donde viene el croquis especial de escuela y las materias que me tocan. Español a primera hora en el salón C7, después Leo en el salón J1...Y para saber a que letras llegan.
-¿Hola?- Una voz femenina delgada me habla a mis espaldas. Volteo y una mujer rubia de ojos azules me saluda.
-Hola- Es lo que digo.
-¿Acaso...eres nuevo?-
-Si asi es, creó que ver tanta gente y tantos salones me marea- ¿No se te puede ocurrir algo mejor Kang?.
-Jajaja, te entiendo, por cierto soy Hani- Me extiende la mano. Asiento tomando su mano.
-Kang, para servirle-
-¿Kang?-
-Si...¿Raro no?-
-Me gusta, es tan original- Me sonríe.
-Y dime Kang, ¿eres de penúltimo año?-
-Si, solo me faltan estos dos semestres-
-Vaya yo igual Kang, creo que iremos en las mismas clases, ¿Que te toca a primera hora?-
-Español en el salón C7-
-Vaya a mi igual me toca ahí, si quieres podemos ir juntos al salon-
-Vaya, me encantaría Hani-
-Entonces es por...- No termina de decir la oración cuando otra chica chaparrita aparece corriendo.
-¡HANI!, Perla se cayo, ¡ven ya al baño de las mujeres!- la chica grita como loca.
-¡Ya voy!, bien Kang, esperame en el salón, tomas el elevador y subes al piso 4, mano derecha y ahí esta luego luego, permiso- Me indica y sale corriendo con la otra chica. ¿Abra pasado algo malo?, ignoro lo que paso y me dirijo al elevador, toco el botón de que baje por personas a la planta baja. Llega y subo en el, toco piso uno y empieza a subir.
Tomo mis hojas impresas y veo mis materias y los horarios. El elevador llega al piso tres y camino, cuando choco con una persona.
-Lo siento- Me disculpó amablemente.
-Creo que le gusta chocar conmigo- La voz masculina que conocí hace dos días esta frente mi, halso la mirada, y los ojos cafés me miran directamente, la piel se me pone de gallina y comienzo a sudar.
-Tu...-
-Creo que no me recuerda, chocó conmigo en el aeropuerto-
-Amm...- Me pongo nervioso, y recuerdo cuando le grite, pero se lo merecía por...payaso, las manos me tiemblan y de un momento a otro no siento las manos, que tiro las hojas y unos libros, me hagacho y a la misma vez el chico de ojos cafés también, nuestras manos se tocan la una a la otra, y nuestros ojos se cruzan...Mi respiración se acelera y en mi corazón parece un carnaval...