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— Bueno señor Park, estos son los medicamentos que estará tomando durante las dos semanas siguientes al igual que estará utilizando las muletas. Espero se recupere pronto, tal vez le vendría bien escuchar un poco a su hijo, espero verlo pronto y se encuentren mejor.

— Si, gracias doctor.

— Gracias doctor Kwan.

— Chico cuida mucho a tu padre.

— Claro -sonreí- nuevamente gracias.

— No agradescas, nos vemos después.

Hice una reverencia y ayude a appa salir y caminar hacia el elevador.

— Vamos, Wookie nos espera abajo.

— Me alegro de que hayas encontrado a alguien además el es muy lindo.

— Hablando de eso..

— No no no, tranquilo, me alegro de que seas muy feliz -sonrió- cuídalo Jong.

— Si..

Entramos al elevador, era incómodo para mí, appa creía que Wook y yo somos novios, aunque.. hace poco nos acabamos de besar, pero eso no explica todas las locuras de ese pequeño.

— Jong ¿Regresaremos a casa?

— No, ya lo había dicho.

— ¿Entonces? ¿Iremos a un hotel? Tengo algún dinero en mi cuenta del banco.

— Bueno, por ahora iremos a casa de Wook, solo será por un par de días después veremos qué pasará.

Las puertas se abrieron y lo ayude a salir.

— Jong.. tengo miedo de que nos ocurra algo.

— No, no pasará nada, no dejaré que te vuelva a lastimar.

Sonrió débilmente y continuamos hasta estar fuera del hospital. A lo que vimos a Wook gritando le a un chico.

— ¡¿Acaso eres tonto?!

— Y-yo..

— ¡No hables!

— N-no fue mi intención..

— ¡Eres un tonto!

— ¿Wookie?

Volteó mostrando su ceño fruncido y tenía los brazos cruzados sobre su pecho. Hasta enojado era lindo.

— ¿Que ocurre?

— El -apuntó al chico a su lado- hizo que perdiera el taxi que había pedido hace media hora

— P-pero..

— ¡Que no hables! -chilló.

— Wookie tranquilo, llamamos a otro ¿Si? No pasa nada.

— Pero Jong -hizo un puchero.

— Vamos no es para tanto.

— Está bien -murmuró cruzándose nuevamente de brazos sin dejar de hacer el adorable puchero.

— ¡Ay pero qué adorable eres! -chilló appa y el se sonrojó.

***

Vamos camino hacia casa, estará appa primero lo cual me deja un poco tranquilo, si mi papá estuviera tal vez se volvería loco al verme de nuevo con Jong.

Aún no se lo que piensen ellos sobre que se queden en casa pero da igual ¿Cuando me ha importado?

Sonreí. Volté  hacia la ventana, el día estaba oscureciendo, el viento golpeaba mi rostro haciendo me sentir bien. Observe por el espejo hacia atrás viendo como Jong cuidaba a su appa que se había quedado dormido. Era un escena tan adorable. Su padre sin duda es un imbecil.

EfímeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora