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Su labio tiene rastros de sangre y está hinchado, ahora los moretones eran más notables, la enfermera de dijo una "probabilidad" de lo que paso, dijeron que recibieron una llamada de un "señor" el cual llamo al hospital para dar avisó del "asaltó" y según aquel señor dijo que lo golpearon brutalmente.
El doctor me dijo  tal vez no podrá caminar en algunas semanas, pensándolo mejor, todo era ilógico, habían dicho que eso había ocurrido en casa, cuando llegue a casa todo estaba en orden, tampoco había rastros de sangre.
Se que fue Young, desde hace unos años he escuchado sus peleas, hace tiempo he notado algunos moretones leves, estos golpes han pasado un límite. Cuando era más pequeño y vivíamos un poco alejados de la cuidad era algo bueno, me gustaba más ese tiempo, donde mis padres eran felices y el amor era notable en ambos, donde los problemas no existían y la confianza era mutua.

Desde que recuerdo mi appa siempre ha sido muy amable con una alma noble y pura, siempre contagiando su alegría teniendo una sonrisa a pesar de todos los problemas que tenía, es una persona admirable, su manera de sonreí es muy linda, el brillo que dan sus ojos son perfectos, sus cálidos y confortables abrazos, su hermosa voz la cual solía usar aquellas noches cuando no podía conciliar el sueño, sin duda era perfecto ángel. Un hermoso ángel.

— Disculpé -una enfermera entró- me avisó el doctor que necesita unos papeles y qué tal vez lo den de alta pronto, por ahora está sedado, necesitara relajarse y tomar descansó, ¿Puede estos papeles y algo de ropa limpia?

— Si, gracias - hice una reverencia, la enfermera hizo lo mismo y salió, volví la vista hacia mi padre, Rose su mejilla y sonreí- appa..iré por la ropa necesaria de nosotros, sacaré todo el dinero que he ahorrado y también el tuyo y vendré por ti, nos iremos lejos y jamás volverán a hacerte daño, tú has echo mucho por mi ahora quiero hacer lo mismo por ti, te lo prometo.

Dejé un beso sobre su frente y salí, encontrándome con el doctor.

— Hola doctor..

— Kwan

— Disculpe doctor Kwan ¿Le puedo pedir un favor?

—Claro ¿Ocurre algo?

— No deje que nadie pase al cuarto de mi appa, absolutamente nadie, no importa que diga que es familiar, no los deje pasar a nadie, por favor doctor -suplique- no de ninguna información sobre su estado de salud.

— Muchacho tranquilizate, no daremos información sobre tu padre a nadie.

— Gracias.

Di una reverencia y salí del hospital, saque mi teléfono y tenía un par de mensajes de Hyuk, abrí la conversación en la cual me decía que pasarían a mi casa a las 9:00pm para celebrar mi cumpleaños, observe la hora y eran las 7:25pm, había estado toda la tarde en el hospital.

Camine hasta la parada de bus, esperaré a llegar a casa para contarle a Hyuk que no podría ir, necesito estar con mi appa.
El bus llegó y subí, observe por la ventana ¿En que momento mi vida cambió? ¿Que día fue el que mi familia de destruyó?
Después de un rato observe el parque que estaba a un par de cuadras de mi casa y baje ¿Era mi peor cumpleaños? No, mi appa no tiene la culpa de nada, sería buena idea que llame a Hyuk para avisarle que no podré ir, toque el bolsillo de mi pantalón y no lo tenía ¡Maldición! Lo había perdido, bufé molestó, ¿Como pude ser tan distraído? Seguí caminando hasta llegar a casa, entre y todo estaba en silencio, genial aún no llegaba mi "padre", subí hasta el cuarto de mi appa saque una maleta y puse su ropa y la mía, busque otra más pequeña para las cosas importantes de el, coloque una foto que tenía de los tres, sonreí, eran unos momentos muy bellos pero lastimosamente no siempre fue así, quiero mucho a los dos, pero no dejaré que lastime más a mi appa, jamás dejaré que eso pase, el sonido del timbre me saco de mis pensamientos, tal vez sería mi padre, baje las maletas y las escondí en la cocina y abrí, estaba un chico de estatura pequeña, su piel era blanca y sus ojos eran grandes de un color café claro, su cabello caía por su frente dándole un aura tierna.

EfímeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora