Un amor im-posible

Tristeza profunda (TJ)

Llegue de la escuela, subí las escaleras corriendo y me encerré en mi cuarto, una vez dentro me arrojé a la cama, me coloqué en posición fetal y comencé a llorar desconsoladamente, afortunadamente mis padres aún estaban trabajando, eso me ahorro la pena de dar explicaciones, aunque es cierto que aún tengo que ver al Sr. Smith el lunes con mis padres. Sin duda este había sido el peor día de mi vida, primero el sueño, luego ver a Cyrus, la pelea con Milo y lo peor, enterarme que no le gusto a Cyrus, eso fue la gota que derramó el vaso, a él le gusta ese chico Jonah, ese chico de hoyuelos. Tal vez lo merezco, no soy una buena persona, ese chico es lindo, tierno y yo, pues yo solo soy TJ, el presumido y arrogante capitán del equipo de basquetbol de la escuela, ¿Quién se fijaría en alguien como yo?, soy un desastre.
Me siento terrible, no solo por mi, por Cyrus, ya que él está enamorado de un chico que jamás le va a corresponder, Jonah estaba enamorado de Andi, la chica asiática. Pensar en cómo Cyrus se pondrá al enterarse de eso me destroza por completo, no podría soportar ver a Cyrus llorar, esos ojos cafés no merecen llenarse de lagrimas, a menos que sean de felicidad.
Me doy la vuelta y fijo la mirada hacia mi tocador, ahí tengo una foto con Cyrus, el verla me destroza aún más el corazón, el solo me ve como amigo.
Me quedé dormido, tuve un sueño extraño, en el sueño estaba yo, enfrente de mi estaba Cyrus sentando en un columpio, los columpios donde solemos reunirnos, él se veía triste, intentaba acercarme a él para ver que tenía pero por alguna extraña razón cada que intentaba acercarme a él me alejaba aún más, yo gritaba para que el girará y me viera pero todo resultaba en vano, recuerdo que a lo lejos pude ver cómo llegaba Jonah, Cyrus comenzaba a hablar con él y no sé cómo, pero se sujetaban las manos, intenté gritar, quise detenerlos y confesarle mi amor a Cyrus pero no podía, vi como los dos se empezaban a besar y fue cuando desperté , ya era algo tarde, mi madre estaba a punto  de llegar del trabajo así que tendría que estar listo para la cena, me levante de la cama, entre a mi baño y me limpie la cara en el lavamanos, volví a mi cuarto y me senté en el borde de la cama, ahí volví a ver la foto que tenía con Cyrus, pasó poco tiempo para que me derrumbara otra vez, comencé a llorar nuevamente y lo peor es que mi madre estaba en la puerta de mi habitación observando todo, no había notado que ella estaba ahí, mi mamá solo entro a mi habitación, se sentó junto a mi y me abrazó tratando de consolarme, recuerdo perfectamente que me dijo:
-Hijo, está bien, se que te gusta ese chico, no tienes por qué llorar-. Yo la abrace y seguí llorando por un rato y le respondí:
-¿Como lo sabes?, no quería que supieras de esto, no quería decepcionarte-. Me separe de ella para hablar con ella.
-Hijo, las mamás tenemos un sexto sentido que nos indica que algo está pasando con nuestros hijos, tenía mis sospechas desde que comenzaste a juntarte mucho con él, fue algo tan espontáneo, no fue como cuando conociste a tus otros amigos hijo, había algo especial, tenias un gran brillo en los ojos cada vez que hablabas con él, cada que me hablabas de él, incluso cuando vi esa foto en tu tocador, son cosas que alguien normalmente no haría, al menos no por un amigo, lo sé por qué yo también fui joven hijo, yo también me enamoré en la adolescencia, y no creas que me decepciona saber que te gusta un chico, sería una mala madre si te rechazara por eso, yo te amo como eres-. Respondió mientras me limpiaba la cara.
-Gracias mamá, me alegra saber que no te doy asco, no como a Milo, tuve una pelea con él en la mañana, el me llamo "marica", me molestó mucho y le di un golpe-. Le dije ya un poco más calmado, esa platica me había dado confianza de decirle lo que había pasado.
-Ay hijo, así que por eso me llamaron a la oficina, está bien hijo, tú solo te estabas defendiendo, tienes que aprender que no a toda la gente le va a agradar el hecho de que a ti te gusten los chicos, pero por eso mismo tienes que aprender a soportar todos esos insultos, tú no les debes de dar importancia- me dijo mientras me abrazaba.
-Gracias mamá, me alegra decírtelo, espero que papá no lo tome mal, ya sabes cómo es él- Le dije.
-Hijo, tú no te preocupes, yo hablaré con él, mejor alístate que vamos a cenar, compre una pizza-.  Me respondió.
Sin duda el decirle todo a mi mamá me tranquilizo bastante, creo que no fue tan malo después de todo, aunque he de admitir que aún duele el saber que yo no seré correspondido por Cyrus. Pero supongo que es algo normal, había escuchado que el amor es así, a unos hace gozar, pero a unos los hace sufrir.
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He vuelto, disculpen si tarde demasiado en actualizar, estoy a punto de regresar a la universidad así que he estado concentrándome en otras cosas y no había dedicado tiempo para escribir, espero darme tiempo de actualizar lo más rápido posible que una vez que regrese a la universidad. Dejen sus comentarios sobre si les va gustando la historia y denme sugerencias de como seguir la historia, se los agradecería demasiado