Aprendiendo a ser un sirviente 『Chrisdiel』Terminada

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—¡Zabdiel! —gritaba una muchacha cubierta de harina.

—Eso te pasa por andar de confianzuda conmigo y para ti soy joven De Jesús, oíste —lo mira serio para después estallar a carcajadas.

—Tú me diste permiso de llamarte por tu nombre —se queja tratando de quitar toda la harina de su rostro.

—Si, lo sé, pero eso no te derecho a dormir en mi cama, sacar comida a la hora que se te dé la gana y lo digo enserio Mina.

—Minina para ti —sonríe coqueta.

—No te acerques tanto, y mejor me voy, iré a molestar a Emil —sale de la cocina antes de que ella lo agarre.

Cuánto sale corriendo su madre lo ve.

—Zabdiel, que hiciste ahora —se cruza de brazos.

—Nada, solo fui a la cocina a comer una manzana.

—¿Y dónde está la manzana?

—En la basura, ya mamá que quieres ahora.

—Deja de hacerles bromas a los empleados, eso no es divertido y tú lo sabes.

—Mina se lo buscó.

—Pero te llevas muy bien con ella.

—Era antes, abuso de mi confianza.

—Te lo ganas por hacerles bromas así.

—Ya no me regañes mamá.

—Te diré que tal vez, sólo tal vez haya un nuevo empleado en la casa.

—¿De?

—Se encargara de la limpieza.

—Ya tenemos 2, está Samanta y Luana, además no quiero un sirviente hombre limpiando mi casa —se cruza de brazos mirando a su madre.

—Estás es mi casa, tú tienes 16 años, además es de confianza, apuesto que te llevarás muy bien con él.

—¿Cuántos años tiene?

—Mañana cumple 18.

—Mayor de edad —sonríe, sabe que con ese chico se divertirá y mucho.

—¿Cómo se llama?

—Solo se su primer nombre y es Christopher.

—Como no quiero hombres de limpieza fingirá que es una chica, la llamaré Christina y usará un traje como las demás sirvientas.

—Estas hombre cariño, no puedes obligarlo a que use traje de mujer.

—No me importa, yo lograré que él se ponga el traje, de eso te lo juro madre.

—¿Y cuando me presentarás a tu novia?

—Cuando yo quiera, además Gwen es un poco...cómo decirlo sin que suene raro.

—Vieja —dice Minina saliendo de la cocina.

—¡Mina! —grita Zabdiel enojado, no le gusta que se expresen así de su novia.

—¿Es mayor que tú?

—No mamá, Mina está loca —ríe nervioso, espera que el nuevo sirviente no se burle de él, pues a todos que les cuenta eso terminan burlándose.