2 Harry y Ginny: La profecía de los Potter

Capítulo 17: Un paso más en la relación

En cuanto estuvieron ambos fuera de la mirada de todos, en el patio de la madriguera, Harry no dudo en tomarle la mano a Ginny, porque realmente seguía teniéndole un poco de miedo a los hermanos de su novia, al menos a Bill, porque los gemelos se lo tomaban en broma y a carrilla y Ron pues él no decía nada, pero a decir verdad ambos amigos no hablaban mucho de la relación que Harry tenía con su hermana. Al final Charlie Weasley estaba en Rumania, que, aunque lo conocía por el torneo de los tres magos, no era como si tuvieran buena relación y pues Percy... bueno todos sabemos que es un idiota. Aun así, Ginny tenía seis hermanos sobreprotectores, que no dudarían en patear su trasero si le hacía algo malo a su hermanita y podía haber una fina línea entre lo que todos ellos creían que podía o no hacer Harry con su novia.

--- Vamos, tengo un buen lugar para escondernos --- le dijo ella con una sonrisa pícara, Harry le sonrió, mirando para atrás temeroso de que algún Weasley los vieran --- yo creo que necesitamos un tiempo a solas... ¿tú no?

--- Sí --- le sonrió dejándose guiar al gallinero al fondo de la madriguera, justo al lado donde el señor Weasley tenía su bodega junto con todos sus cachivaches muggel.

En gallinero estaba repleto de pequeñas jaulas abiertas con gallinas, que parecían no salir de su lugar y Harry dedujo que era gracias a un hechizo, también había algo de heno regado por el piso y diviso un columpio hecho con una llanta en una esquina, estilo muggel.

--- Papá dijo que era divertido y lo puso --- dijo Ginny sonriendo con diversión --- y sí, me gusta, es relajante... dijo que era algo de los muggel para divertirse.

--- Sí, más para niños, es un columpio --- le dijo Harry, ella se subió al columpio sentada --- ¿sabes que también puedes balancearte parada?

--- Sí, pero también me dijo mi papá que cuando estás sentada, pueden empujarte... --- se encogió de hombros --- él lo hacía cuando era niña.

--- ¿En verdad? --- pregunto Harry, posicionándose atrás de ella, para darles pequeños empujones, mientras Ginny sonreía --- hablando de cosas divertidas... ya mero cumples años, ¿Qué es lo que deseas que te regale?

--- Sabes que no tienes que regalarme nada... --- empezó, pero Harry volteó a verla con una ceja levantada, porque se desesperaba que ella no le gustara mucho los regalos --- Harry, en verdad, no me importa lo que me regales... al contrario, siempre me gustan tus sorpresas... ¿Qué tal un dije para la pulsera? --- pregunto pensativa --- dijiste que me ibas a regalar un dije por cada acontecimiento importante...

--- No se me olvida y te debo varios --- dijo besándole en la mejilla --- pero quiero regalarte algo que desees tú en verdad y que necesites... ¿Qué es lo que más has querido de niña y por cualquier razón se te ha negado?

--- Bueno... --- Ginny se quedó pensando, porque había algo que quería desde hace mucho tiempo, pero pensaba que eso era ya abusar --- desde hace tiempo que quiero una escoba propia, no una de mis hermanos, pero sé que sería difícil que mis padres me la regalaran, batallaron para comprarle una barredora a Ron el año pasado y no está en ellos poder comprar otra esté año...

--- Entonces, quieres una escoba --- le confirmo Harry, Ginny se sonrojo y asintió despacio --- ¿ves?, ahora poder comprarte lo que realmente quieres...

--- Pero Harry, es muy costosa... --- le dijo Ginny, Harry se encogió de hombros, con la herencia de su tía, podría permitirse comprarle una escoba a Ginny y si eso hacia feliz a su novia... no le importaba --- bueno, si me vas a regalar una escoba... no quiero una tan cara, tal vez una barredora como la de Ron...o una cometa como la de los gemelos.

--- A ver, tú ya me dijiste lo que querías, el modelo y lo demás me toca escoger a mi --- le dijo Harry parándola del columpio

Se quedaron un rato ahí mirándose el uno al otro, no hacía falta hablar solo estar juntos, sin necesidad de nada más. Era algo que les gustaba ambos de su relación.