Guiando a una oveja.

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Septiembre 2 de 1991.

Draco Malfoy.

-Maldito Potter -murmuraba con frustración mientras recorría de arriba a abajo mi habitación, estaba por romper alguna de las innecesarias lámparas de la habitación, cuando la puerta se abrió.

-¡Draco! -gritó Blaise entrando... o más bien casi cayéndose en la entrada de la habitación.

-Tu gracia al andar es sublime, Blaise -me burle con algo de acidez en mi voz.

-Deberías tomar tu siesta de belleza, estás muy irritable -dijo recuperando el equilibrio y me miro con el ceño fruncido.

-¿Qué? -pregunte al ver como su mirada se volvía cada vez más confundida.

-¿Vas a matar a alguien? -pregunto señalando mi mano y pude notar mis nudillos blancos, el leve temblor en mi cuerpo y podría jurar sobre el emblema de mi familia que mis ojos estaban unos tonos más oscuros de lo que deberían.

-No -dije entre dientes y tome un par de respiraciones para calmarme -Al menos que romper unas lámparas sea considerado asesinato -dije un poco más calmado.

-¿Quién molesto a la princesita? -pregunto con tono burlón.

-¡Cállate Blaise! -gruñí molesto y algo avergonzado, pero no aceptaría que me estaba comportando infantilmente.

-Ya, ya -dijo divertido y se recargo en la puerta -Dile al tío Blaise que pasa -dijo con algo de burla, pero no pude evitar la pequeña sonrisa que se formó en mis labios.

-En primero no eres mi tío, aunque si eres más viejo -me burle de él.

-¡Oye!

-Y en segundo... mi padrino me dio un sermón sobre ser imprudente y retar a Potter, algo sobre que está en peligro y no sé qué tanto más, como si ninguno de nosotros corriera el mismo peligro -me queje y me deje caer con frustración en mi cama, mi padrino era insoportable cuando se ponía en modo mamá preocupada.

-¿Por la estúpida broma de la recordadora? -preguntó luego de pensar en lo que había pasado durante el día y asentí -Eso es exagerado bro -dijo acercándose a mi cama y mirándome desde arriba.

-Ni que lo digas, Potter es un inútil -dije molesto por todo lo que había ocurrido.

-¿Y solo estas molesto por el sermón o por qué entro al equipo de quidditch? -pregunto Blaise con esa mirada que aprendió de su madre, esa que ponían cuando quería obtener algo a como diera lugar.

-Púdrete Blaise -dije molesto y me senté en mi cama, sintiendo la furia fluir por mi cuerpo, literalmente esta situación me asfixiaba en todos los sentidos, necesitaba más libertad, era mi naturaleza -Estos años serán pesado -murmure con una muy cargada molestia en mi voz.

-Pues hay que buscarle el lado positivo -dijo Blaise con una sonrisa que me dio escalofríos, pero controle mi expresión.

-¿Y eso sería...?

-Nos dijeron que hay que cuidar de Potter, y hasta donde yo sé hay un posible peligro en el castillo ¿Dónde era? Ah sí, el tercer piso, sería bueno investigar un poco y...

-Y no harán nada -dijo Theo entrando al cuarto con varios libros y la ropa algo desordenada -No se meterán en problemas, no saldrán tarde y definitivamente no desobedecerán una orden de Snape -nos miró fijamente, mientras sus voz demostraba que no cedería a nada que dijéramos.

-Que aburrido Theo -se quejó Blaise -Solo le echaremos un ojito, por favor -dijo poniendo ojos de cachorrito.

-¡Oh, no Blaise! No volveré a caer -dijo molesto, mientras dejaba caer los libros en su cama.

Nada es lo que parece (Harco/Drarry).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora