Te extrañe mucho

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Lo extrañé demasiado.
Mucho la verdad.

Pero ya nada importaba, habíamos vuelto y eso me hacía muy feliz.

Al día siguiente Presley y yo tuvimos una de las mejores citas, hicimos un picnic en la playa y armamos un rompecabezas de cinco mil piezas que había comprado.

El había recordado lo mucho que me gustaban los rompecabezas y decidió armar uno conmigo, fue muy lindo porque nos quedamos por horas en la playa armándolo hasta que oscureció.

Cuando llegamos a mi casa, me entrego una cajita de color morado pastel.

- ¿ Y esto? Dije sorprendida.
- Ábrelo y verás qué es.

Cuando lo abrí, una enorme sonrisa invadió mi rostro, era un collar con un dije de un rompecabezas.

- Cada vez que lo tengas y no esté a tu lado, solo recuérdame. Porque yo siempre tendré la otra mitad. Obviamente en un collar no-y comenzó a reír. Pero siempre lo tendré. Es un recordatorio para que nunca dejes de pensar en mi.

Esas palabras fueron las más tiernas que había dicho, me acerqué a el y lo besé.

Nos besamos y  pude sentir su gélido cuerpo, tenía frío pero nunca me
Lo dijo, ya que él me había prestado su casaca porque comenzaba a correr frío.

No te atrevas a olvidarmeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora