El arte de tu piel

CAPITULO 37

Florence and the machine - over the love

Créditos a: NoraGCipriano
Dedicado a:@johadavila2

Alejandro

Miro el reloj nuevamente antes de dejar caer mi mano sobre mi rostro. Esto es lo que viene en las letras pequeñas en cuanto a la paternidad.

2:44 m

Casi la misma hora de siempre. En serio comenzaba a arrepentirme por haber tomado la desición de conservarlo pero ya no había marcha atras, ademas soy ub hombre de palabra.

¿Quien diria que yo, un mafioso de renombre en Italia estaría levantandose a estas horas y no para salir a hurtadillas de un apartamento sino para alimentar a un bebé?

Si, nadie.

Hace algunos meses me dije a mi mismo que iba a resarcir todo el daño que le hice a Victoria y habian pasado dos meses y medio desde que comencé con ello. No me rendire a estas alturas.

Sobornar a todo el personal de turno del hospital fue lo mas fa6cil de todo, incluso el hacerlo con el ginecólogo con el que consultaban, no voy a excusarme ni nada por el estilo porque el lugar que ocupaba el ruso me pertenecía por derecho a mí, pero por obvias circunstancias aquello estaba fuera de mi alcance.

Despues de sus últimas citas el médico había descubierto algo inquietante e inmediatamente se me informó. Tomamos las medidas necesarias e hicimos que cumpliera todas las instrucciones aún sin saberlo. Al parecer todo iba bien, pero no todo lo que brilla es oro.

La tarde que entró en labor de parto todo ocurrió demasiado rápido, hicieron lo necesario e intervinieron a tiempo pero no contabamos con que el bebé que era más viable naciera muerto. En ese instante mi mundo se vino abajo, pero ninguno detuvo sus labores ni el plan en marcha.

Si hubieran esperado a que me despegase del cuerpo del pequeño Caleb en estos momentos Bastian estaría muerto. Si, estaba alli. Vestido de pasante, pero lo estaba.

Si,Bastian, incluso había descubierto un diario en el que ella tenía opciones de nombres y ese era otro que tenía entres su preferidos.

Tras haber informado a Andrey que el bebé nació sin vida ocurrió lo previsible, se apartó de la ventana que le daba vistas al cuerpo de Victoria dejandonos fuera de su vista y en ese momento ocurrió lo inimaginable. El segundo bebé nació vivo pero el estado de sus pulmones y su cuerpo era muy delicado, asi que aprovechamos la ausencia de el ruso para ocultar al bebé en una de las salas conjuntas.

Las primeras 24 horas fueron cruciales y gracias  al cielo, sobrevivió, pero no era suficiente. Día a dia se aferraba a la vida dentro de su incubadora hasta que una semana después me informaron que habia un metodo para que avanzara mas rápido.

El papá canguro.

No lo pense dos veces y habilité una de mis propiedades para que todo pudiera desarrollarse en total calma desde alli. No me arriesgaria a encontrarme con el ruso, mucho menos con Victoria estando en el hospital.

Tenia mas miedo de ella que de él. Según me habian dicho no estaba muy bien pero tampoco podia ponerle a su hijo de frente y darle falsas esperanzas, aun estaba delicado para ese entonces y no me arriesgaba a hacerlos sufrir a todos.

La había visto aquel día en que nos despidimos de Caleb, ella era otra persona. Y no podía sentirme más miserable conmigo mismo, tenía que hacer que de alguna forma mi culpa se fuera, asi que le escribí aquella carta con los sentimientos más sinceros de mi corazón.