Estás mirando, lo siento
Sé que no debería mirar fijamente
Imaginé tus manos sobre mi
Creo que quiero dejar que esto pase
-Camila Cabello.
oO0Oo.
Ella siempre describía su trabajo como monótomo, aburrido, y como un ciclo sin final. Llegar, cambiarse, sonreir, caras diferentes que pedían cualquier cosa, entregar, volver a cambiarse e irse. Su rutina de los lunes, miercoles y jueves. Era un círculo vicioso. Pero con la llegada de ese chico de ojos verdes, con sus comentarios divertidos y sonrisas torcidas, su trabajo fue más llevadero. Que deseaba que fuera de bolsillo para llevarlo a todos lados para hacerla reir.
Además, pudo comer galletas y una malteada gratis.Cuando fue a cambiarse, tarareando Dancing Queen de ABBA. Josh, el cajero, estaba sentado en el suelo poniendose sus zapatos.
-Hola, Ginny- dijo, mientras se apoyaba en la pared y se levantaba.
-Hey- fue lo único que respondió antes de meterse en el baño con su ropa. Cuando salió, colocándose la rebeca, Josh aún seguía ahí.
-Oye, Ginny... eh, ¿te gustaria hacer algo? Qué sé yo, a dar una vuelta.
-Lo siento, Josh. Pero ya tengo planes.
-Ah...- Ginny le sonrió y guardaba su uniforme en el pequeño locker- ¿Con el chico de lentes que vino contigo?
-Sip.
-Será otro día, entonces, Ginny- dijo en voz baja, y se ponía una gorra blanca sobre sus rizos castaños.
Ella estaba segura que no. Igualmente asintió para no hacerlo sentir mal y salió detrás de él. Recapítulo lo que iba a hacer, iría a la casa de un chico el mismo día de conocerlo.
Por ella, estaba loca como una cabra.
Mentiría si decia que no estaba nerviosa y que su estómago se retorcía dolorosamente por la ansiedad. Además, la extraña manía de Harry de mirar a las personas directamente a los ojos cuando hablaba no ayudaba a sus nervios.
Harry guardaba sus cosas en su mochila negra, estaba de espaldas a ella. Con una sonrisa divertida, se acercó.
Cuando puso las manos en la espalda de Harry, con el fin de sólo sobresaltarlo, con un movimiento brusco. Él se asustó tanto, que cuando volteó, tomó su mano, y presionó el pulgar contra su muñeca.
El dolor círculo por todo su brazo y tuvo que doblar un poco el cuerpo para minimizar el dolor. Él cuando se dió cuenta que era ella, asustado la soltó, como si estuviera hecha de fuego y lo quemara.Sintió un extraño Deja vú, de él haciendole una llave en otro momento. Sacudió la cabeza, era imposible.
Su respiración era agitada y el color de su rostro habia desaparecido. De soslayo, vío como sus manos temblaban de manera descontrolada.
-Lo...lo siento... lo siento mucho, en serio- él tragó saliva como si hubiera pasado una bala por su garganta- Me... me asustaste.
Se llevo la mano izquierda al pecho, probablemente para calmar los latidos de su corazón. Ginny, en vez de enojarse, se sintió muy arrepentida.
-Oh, Harry, en serio lo siento. No sabia que te asustarías tanto- dijo, en voz baja. Tomó su mano derecha, sus dedos se retorcían, temblando. El negó con la cabeza lentamente.
-No, tranquila. Perdóname tú a mi.
Ella sonrió, cosa que hizo que las mejillas de Harry volvieran a tomar un color rosado. Harry sonrió timidamente, con la vista en el suelo. Su respiración ya había empezado a controlarse.
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Tú y otros tipos de magia (Hinny)
FanfictionHarry es reservado. Ginny es un libro abierto. Harry prefiere la calma, los libros, la física y el sarcasmo. Ginny prefiere la música, la escritura, la justicia y la risa. Eran diferentes. Lo único que tenían en común era el humor negro y que estaba...