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—Entonces —dijo Minho lentamente— ¿dónde se conocieron?
—En la plaza.
—En un sitio web.
Todos en la mesa miraron a Seungmin y a Felix: el primero frunció el ceño tratando de no lucir enfadado en tanto el segundo se encogía de hombros, sin dejar de sonreír.
—En un café.
—Se acercó mientras vendía mis pastelitos.
Seungmin se giró hacia Felix con los ojos entrecerrados.
—¿Haces pastelitos?
—Si te dedicaras a algo más que tocarme el trasero, te fijarías que te hago pastelitos —mintió Felix con una expresión indignada.
Minho se atoró con su saliva, pero antes de que pudiera hacer algo más, Jisung se movió para evitar un desastre. Sin embargo, de poco le sirvió ya que Woojin le escupió el agua que había estado bebiendo.
Con un chillido de indignación, Jisung le dió un golpe a Woojin.
Seungmin hizo rechinar sus dientes.
—Nos conocimos en un café que queda en la plaza luego de haber hablado por un sitio web —soltó Seungmin dándole un pellizco a Felix en la pierna para que no dijera nada.
Jisung, limpiando su rostro con una servilleta, los miró con los labios arrugados.
—¿Seguro, Seungmin? —le dijo con sospecha—. Nunca antes nos habías hablado de este chico —la sonrisa de Felix se tambaleó un momento—. ¿No nos estás mintiendo?
Seungmin observó al mayor con frialdad y una expresión imperturbable, sin dejar traslucir un poco parte de la mentira. Sin embargo, estaba tardando mucho en responder, y Felix decidió que lo mejor sería intervenir.
¿Y qué mejor manera de intervenir que humillado a Seungmin?
—¡Cachorrito, ¿No le has contado de mí a tus amigos?! —dijo tomándolo del brazo, llamando su atención.
Seungmin soltó un resoplido, pero antes de poder decir algo, Woojin comenzó a reírse como desquiciado.
—¡¿Cachorrito?! —soltó entre risas—. ¡Seungmin, eres su lindo perrito! —Minho bajó la vista, ocultando su sonrisa—. ¿En la cama ladras, Seungmin? —incluso Jisung tuvo que tapar su boca para no reírse mientras Woojin se sostenía de la mesa para no caerse debido a la risa.
—Oh, voy a matarte —Seungmin se puso de pie mientras Felix comenzaba a reírse también.
—No si yo lo hago primero.
Antes de lanzarse sobre su amigo, alguien tomó del hombro a Seungmin y tiró de él, volteándolo. Todos se giraron a ver el momento exacto en el que el idiota de antes, que había estado abrazando a Felix, golpeaba a Seungmin en la mejilla con su puño, con el ceño ligeramente fruncido.
Seungmin cayó al suelo mientras Felix soltaba un grito bajo.
—¡Chan, ¿qué demonios estás haciendo?! —chilló Felix poniéndose de pie.
Seungmin debía admitirlo: por un breve momento, quería saber cómo se veía Felix diciendo maldiciones y cosas sucias en la cama.
Borró la imagen mental que se hizo antes de lanzarse sobre el, ambos cayendo al suelo.
