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Seungmin de pronto estaba besando a Felix, y cuando pestañeó, no sabía cómo, pero llegaron a un callejón donde estaba acorralando al pobre chico contra la pared, sin separarse de él un momento, sin dejar sus labios unos segundos, sólo lo suficient...

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Seungmin de pronto estaba besando a Felix, y cuando pestañeó, no sabía cómo, pero llegaron a un callejón donde estaba acorralando al pobre chico contra la pared, sin separarse de él un momento, sin dejar sus labios unos segundos, sólo lo suficiente como para que pudiera respirar y no morir ahogado.

Sus manos estaban en su cintura, aferrándose a él, mientras los brazos de Felix estaba rodeando su cuello, acercándolo, apretándolo, como si temiera que pudiera alejarse de él.

Pero Seungmin no pensaba alejarse de Felix, al menos, no por ese momento.

¿Cómo habían acabado en esa situación? Bueno, qué importaba.

Seungmin podía besar todo el día a Felix y jamás se cansaría. Y no le importaba lo que significara eso, le daba lo mismo, sólo quería besarlo en cualquier momento y eso estaría bien para él.

A su oído, Felix gimió en voz baja cuando sus labios se deslizaron por su cuello.

—Te estoy besando con tu consentimiento, ¿Cierto? —se burló Seungmin de pronto, deslizando sus manos más bajo, dándole un apretón en el trasero.

Felix se sobresaltó, sus mejillas ruborizándose.

—S-sí...—jadeó sintiendo la entrepierna de Seungmin frotándose contra la suya.

—Bien —satisfecho, Seungmin siguió besándolo por el cuello, mordiendo, chupando, lamiendo.

Tener a Felix bajo él, de esa forma, lo estaba enloqueciendo a más no poder. No había forma de explicarlo, pero no importaba, porque si ambos lo estaban disfrutando entonces estaba bien.

—Es... estamos en pu-público... Seungmin... —gimoteó Felix al sentir los dedos hábiles del menor desabrochar su pantalón.

—Tranquilo —gruñó Seungmin, bajando un poco su pantalón y ropa interior—, seremos rápidos.

Felix quiso preguntarle a qué se refería con eso, pero de pronto una de las manos de Seungmin lo estaba masturbando, subiendo y bajando, y era un manojo de nervios, de gemidos. El menor lo siguió besando, pudiendo sentir la sonrisa del chico contra sus labios, para luego abrir su propio pantalón, sacando también su miembro, comenzando a masturbar ambos penes frotándolos entre sí.

Tuvo que morder su labio inferior para no gritar por el placer que estaba sintiendo.

La mano de Seungmin que los estaba masturbando lo soltó, e iba a soltar un quejido, pero la cambio por la otra mientras deslizaba sus dedos húmedos gracias al líquido preseminal por su trasero, y Felix gimió al recibir un pequeño apretón.

Sonríendo contra sus labios en un beso demandante, Seungmin presionó un dedo húmedo contra la entrada de Felix, sin empujar demasiado, y escuchó el quejido del chico.

Profundizó el beso en el momento en el que metió más profundo su dedo, sin dejar de masturbarlo, y pudo sentir el gemido ahogado de Felix contra su boca.

Comenzó a mover su dedo en su interior, penetrándolo lentamente, haciendo pequeños círculos mientras su otra mano seguía ocupada en masturbar los dos pollas frotándolas contra sí, y pronto Felix estaba gimiendo en voz baja, mordiendo su labio inferior mientras Seungmin se dedicaba a seguir marcando su cuello.

El segundo dedo causó que Felix volviera a sobresaltarse, pero aceleró los movimientos de su mano masturbándolo, por lo que pronto el chico olvidó el dolor momentáneo para deshacerse en gemidos.

Pronto, los dedos de Seungmin encontraron su punto débil y Felix, por supuesto, no fue capaz de aguantar mucho. No cuando estaba recibiendo estímulos en tres zonas: su cuello su pene y su ano. Gimiendo contra el hombro de Seungmin, temblando por completo, sujetándose del mayor, llegó al orgasmo sintiendo que podía alcanzar el cielo en ese momento.

La visión de Felix corriéndose fue suficiente como para que Seungmin le siguiera entre jadeos.

Ambas camisas quedaron manchadas con el semen mientras trataban de recuperar el aire, y Felix se apoyó en la pared, respirando aceleradamente mientras Seungmin se alejaba mirando su ropa sucia.

—Eres horrible —se quejó Felix sintiendo sus mejillas ruborizadas.

—Cuando estemos a solas —le murmuró Seungmin acercándose—, vamos a terminar esto de otra forma.

Felix sólo le respondió con una sonrisa desafiante.

Felix sólo le respondió con una sonrisa desafiante

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𝙉𝙤𝙫𝙞𝙤 𝙙𝙚 𝙖𝙡𝙦𝙪𝙞𝙡𝙚𝙧 - 𝙎𝙚𝙪𝙣𝙜𝙡𝙞𝙭Donde viven las historias. Descúbrelo ahora