- Si algún día salgo de aquí, juro que te mataré, hermana - dice Kenzo remarcando la última palabra.
- Ya lo sé, pero yo misma me encargaré de que no salgas de aquí - le responde Clover.
Me amarran las manos y me conducen a una celda, junto con Briggite y Kenzo.
- Bueno - habla Clover con una sonrisa de oreja a oreja antes de cerrar la puerta de la celda - Álex me ayudará a controlar mis nuevos poderes.
- Los poderes no se pueden tranpasar de unas personas a otras - le suelta Briggite.
- En realidad sí, Álex me explicó cómo tu abuela te dio sus poderes, así que buscaremos una forma.
Se va.
- ¡Ranya! - me grita Briggite - ¿es que te vas a quedar ahí quieta y callada sin hacer nada?
- Calla - le ordena Kenzo - si quieres, traza tú un plan, ya que siempre son muy buenos...
La cara de Briggite cambia ante las palabras de Kenzo. Él está enfadado y lo demuestra con sarcasmo.
Kenzo se acerca a mí y me susurra:
- Estoy contigo, te ayudaré aunque sea lo último que haga.
- No será lo último - por fin hablo - esta no será la última batalla de nadie.
Kenzo y Briggite se duermen. Yo no puedo conciliar el sueño.
Me concentro para intentar desatarme de las esposas. Nada. Tengo que admitir que mi magia... Espera. Yo tengo como dos poderes. La magia de una persona sólo se puede ceder a alguien si va a morir. Como hizo mi abuela. Es decir, que la magia que me han absorvido no era la mía, sino la de Romina. Por lo tanto, aún tengo mi magia, pero es muy débil. Le falta entrenamiento, ya que todo este tiempo he usado la de ni abuela.
Solo espero que no encuentren la forma de transpasar los poderes.
- Kenzo, Kenzo - hablo en bajo.
- ¿Qué pasa? - abre los ojos retorciéndose por la incomodidad de dormir sentado y en un lugar tan poco acogedor.
- Me habías dicho que tenéis las orejas así porque podéis escuchar a mucha distancia, ¿verdad?
Asiente.
- Pues quiero que escuches lo que están hablando Álex y Clover.
Kenzo cierra los ojos y apoya su cabeza contra la pared.
Después de un par de minutos, Kenzo habla:
- Los poderes de tu abuela han ido para tu collar, y no saben cómo usarlo.
- Es decir, tenemos una ventaja.
- ¿Tienes una idea de cómo vamos a salir de aquí?
- Podríamos unirnos Briggite y yo e intentar romper las esposas, pero está enfadada conmigo, con razón.
- Nada de esto ha sido culpa tuya.
En realidad sí.
Kenzo gira la cabeza hacia donde se encuentra Briggite y le habla con tono amistoso.
- Vale - habla Briggite - tendré que salvar otra vez yo la dimensión.
Voy a dejar que siga pensando eso, si le llevo la contraria se enfadará.
- Lo haremos juntos - la corrige Kenzo y me sonrie. Yo intento de volverle la sonrisa, pero eso sólo ha quedado en un intento. No puedo dejar de pensar en Álex.
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Primera dimensión
Science Fiction¿Acaso pensábais que con acabar con Dankenil, Jomlen estaría a salvo? Al fin y al cabo, Dankenil simplemente era un brujo celoso que ansiaba poder. Pero nosotros conocíamos la magia que usaba. Ahora hay nuevos peligros, nuevas dimensiones, nuevos se...