Capítulo 13

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Así, por primera vez desde que llegamos aquí, Briggite y yo estamos unidas.

Tenemos que escapar, y no hay otra forma.

Kenzo ha escuchado que la barrera mágica que protegía Jomlen está desapareciendo, claro, ahora sin los poderes de mi abuela soy débil, pero tengo que conseguirlo, tengo que evitar que lleguen a la ciudad o será el fin de todo.

Las cadenas que nos atan se sueltan.

- Vale, ¿alguna idea de lo que podemos hacer ahora? - pregunta Briggite.

- Podemos hacer clones y escaparnos por el techo como hice una vez. Así no notarán nuestra ausencia.

- Buena idea - me anima Kenzo.

Yo consigo clonarme más rápido, ya lo había hecho con Kenzo.

- Bien, los clones son temporales, así que hay que darse mucha prisa.

Los tres entrelazamos nuestras manos y levitamos atravesando el techo.

Llegamos a una especie de sala de vigilancia, que para nuestra sorpresa está vacía. ¿Dónde se han metido? ¿Está sucediendo algo tan importante como para que no haya nadie controlando esto?

- Kenzo, ¿escuchas algo?

- No, está muy lejos, pero sé en qué dirección, seguidme, están fuera.

Corremos por los pasillos vacíos, derecha, izquierda y bajamos muchas escaleras hasta llegar a nuestro destino. Nos escondemos, pero la multitud está centrada en un punto que no logor ver y no notan nuestra presencia.

Puedo respirar este aire, custosamente. Vuelvo a sentir mi cuerpo pesado.

Kenzo se queja frotándose las piernas.

- ¿Estás bien? - le pregunto preocupada.

- No lo sé, es que... - lo agarro cuando está a punto de caerse - mis piernas, ya no puedo caminar - se lamenta.

- No es posible, el collar debe estar en peligro, deben de estar usando su poder o algo.

Con la ayuda de Briggite, arrastramos a Kenzo hasta una sala en la que no podrán verlo.

- Kenzo, quédate aquí, intentaremos conseguir el collar, en cuanto lo tenga en mis manos, andarás de nuevo.

- Es peligroso, no puedes ir sola, si me traes los aparatos para caminar iré contigo.

- No, es arriesgado, por favor, quédate aquí, si consigo el collar te prometo que volveré a por ti.

- ¡Venga! - grita Briggite que está esperando en la puerta - no tenemos tiempo.

Kenzo me mira con cara de súplica. Me imagino lo que es sentirse sin poder hacer nada ante una situación así.

- Briggite, ve a por sus aparatos por favor, ahora no hay vigilancia, yo investigaré qué están tramando.

- Estás de broma, ¿no? - se queja Briggite, después mira a Kenzo - vale, iré - resopla.

Dejo a Kenzo y me colo entre la multitud, que no parece notar que soy diferente a ellos, están como... hipnotizados. Me doy cuenta de la verdad cuando veo a Clover en lo alto de una especie de escenario con un aparato que da vueltas, así todos la obedecerán. Es malísima. Tengo que llegar a junto ella. Tiene el collar al cuello. Lo único que tengo que evitar es a Álex, que está a su lado revisando a todos.

Me parece que están intentado abrir un portal, pero le cuesta trabajo, aun aguanta un poco mi protección, pero no demasiado.

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