Perdidos en la nada

Capítulo 13

Cuando me despierto Sam no está (por variar). La luz entra por el hueco que se supone que es una ventana y me da en los ojos con mucha intensidad, ha pasado un día entero.

Me levanto de la cama y miro la altura del arbol donde estoy, no tengo miedo. No se que me ha pasado, pero ya no me aterrorizan las alturas.

Voy bajando de rama a rama hasta llegar al suelo. Veo a Sam, pero hay otra persona... Creo que es un chico, no estoy segura, esta todo muy oscuro y lleno de plantas que hacen más dificil poder distinguir algo.

Me voy acercando a ellos, pero cuando por fin puedo ver algo la otra persona se va y Sam me mira con cara de poker. Me acerco más a ella pero se aleja de mi muy deprisa, que extraño. La intento alcanzar, pero va demasiado deprisa.

-¡¡¡Espera Sam!!!

Ella sigue corriendo, cada vez esta más lejos, hasta que desaparece entre la vegetación.

De repente oigo unas pisadas detrás mio. Me giro y veo una sombra entre los arboles.

-¿Quién eres? -le pregunto aterrada.

-¿Qué es lo que quieres? -me dice, su voz parece de un chico.

-Yo no voy a haceros daño. Como le dije a tu amiga, yo no vine aqui queriendo, el barco se undió y la marea me llevo hasta aquí. -tengo que hablar gritando, ya que está muy lejos. Así que me voy acercando poco a poco.

-¡No te acerques! -me dice desesperado.

Yo me paro y entonces él se aleja y lo pierdo de vista.

Ahora se que hay dos personas en la isla, aunque alomejor hay más. ¿Por qué se pensaran que les voy a hacer daño? Y ahora que lo pienso, ¿me habrán hecho algo mientras dormía? Lo único que tengo claro es que quiero volver a casa lo antes posible. Pero las otras personas no lo deben saber, tengo que preparar algún plan para salir de aquí. Porque si se enteraran no me dejarían marchar, o alomejor están haciendo todo lo posible para que me valla. Lo mejor será que no lo sepan.