Capitulo 15

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Ya había acabado todo mi trabajo, gracias al Cielo.

Era ya sábado, un poco pasado de medio día, pero ya dentro de poco seria libre.

Extrañamente una guardia de viernes estuvo tranquila, así que los pendientes y cosas por hacer temprano eran muy pocas y el turno revelo ya estaba llegando.

Desde la conversación que tuve con Martín la última vez, no he mediado palabras con él.La última vez que lo ví estaba ingresando a un paciente al quirófano para una apendicectomia de emergencia.

Había cenado con Joel, y Martín de milagro no se apareció, ni me había molestado en averiguar las razones, no sabía si seguía molesta por él, al final me había pedido disculpas.

Por fin acabamos de entregar el turno, y pude ser libre.

Llegué a mi casa, eran las tres de la tarde, y lo primero que hice fue tomar un baño.

Al salir, me puse una pijama cómoda,  y me recosté. Justo cuándo iba a cerrar mis ojos, mi teléfono recibió un mensaje:

"Domingo es libre, Sábado es para carnavalear, paso por tí a las 10:00 pm

Pd: Enviame tu dirección"

Att: Cristhian H. 

Había olvidado mi salida con el Dr. Hernandez

"Estaré lista"

Le envíe mi dirección por Google Maps, y active la alarma en mi teléfono a las siete de la noche para tener suficiente tiempo para prepararme.

***

A las 9:45 estaba casi lista, estaba retocando mis últimos detalles en el maquillaje.

No sabía a donde iría con Cristhian, pero opté por alisar mi cabello y sujetarlo en un moño, bastante elegante.

Vestía un vestido negro, totalmente entallado a mi cuerpo y unas sandalias altas, de tacón grueso. Había decidido que mis labios fuesen el centro de atención en mi rostro al aplicar un labial oscuro.

Justo como Cristhian había dicho, a las 10:00 en punto de la noche recibí su mensaje

"Su carruaje esta listo Señorita"

Baje inmediatamente, y ¿Les había dicho que Cristhian era apuesto?

Se notaba que habia descansado, ya que su rostro se veía bastante fresco.

Vestía un pantalón jeans claros, rotos en las rodillas, con una camiseta celeste en cuello V con una chaqueta negra de cuero, y unos botines del mismo color.

Lucía bastante rebelde y atractivo.

Se notaba que había cortado su cabello, ya que a los lados, estaba más corto que de costumbre, sus ojos marrones oscuros resaltaban y brillaban.

-Es un hecho, seré la envidia del lugar.

-Tú no te quedas atrás doctor, me ganaré el celo de muchas niñas.

Soltó unas leves carcajadas.

-Gracias? Pero de verdad Adrianita, estas muy bella.

-Gracias Cristhian, a dónde vamos?

-Pues a como te dije, iriamos a carnavalear, pero con lo preciosa que estas, por mí te llevaría a los lugares más elegantes del mundo a que luzcas tu belleza mujer.

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