No sabía lo que hacer, estaba en un oscuro lugar, y no lograba comprender cómo había llegado allá. Creo que estaba dormida, pero no lograba despertar, no recordaba haber estado en ese lugar, nunca lo había visto, era extraño estar ahí, estaba perdida, no sabía quién era, NO SÉ QUIEN SOY.
Al rato, pude abrir los ojos, me asusté porque vi a alguien a mi lado, era un chico de pelo negro, ojos marrones y una altura que no podía reconocer, no sabía quién era él. Este chico estaba dormido en una especie de sillón o algún otro objeto, pero parecía que no era nada cómodo, se veía incómodo. Miré más a mi alrededor, era una habitación por lo que logré observar, había máquinas y tubos a mi alrededor, era todo blanco.
Me empezó a doler la cabeza, como si me habría tirado por un séptimo piso y me habría dado en la cabeza contra el suelo, vino un doctor, despertó al chico y me pregunto por mi situación, menciono mi apellido, Lacunza, no lo había escuchado antes.
Le dije al doctor lo del dolor de cabeza, él respondió que era algo normal, después del golpe que me había pegado.
- ¿Qué golpe Doctor? -le dije confundida y asustada, a la vez.
- ¿No se acuerda, señorita Lacunza? -respondió él.
El doctor me explico y me afirmó, que gracias al golpe que me pegue, no recordaba absolutamente nada de mi vida, ni quién era, ni qué cosas hacía. Al chico que estaba sentado en el sillón incómodo, se le empezaron a caer las lágrimas, yo no entendía el porqué de la causa, pero llegó a ser una cascada en persona. Él vino disparado a mis brazos, no tuve más remedio que seguirle el abrazo. Empezaron a caerse más gotas de esos ojos marrones, yo lo intente tranquilizar con todo lo que puede, pero estaba confusa y creo que no sirvió de mucho.
Cuando él se tranquilizó, me dijo como se llamaba y quien era para mí. Charlamos un buen rato y me contó, lo que me gustaba, como me llamaba, como era antes del accidente, como nos conocimos él y yo, que hacíamos juntos y bastantes cosas más.
Él dijo que se llamaba Mikel. Hablo de que manteníamos una relación y vivíamos juntos, y que yo me llamaba Natalia, Natalia Lacunza, que tenía 20 años, y que me gustaba la música.
Estuve charlando un buen rato con él, pero de repente entró una mujer a la habitación, al entrar me dio un abrazo bastante fuerte, casi me ahoga de la fuerza que tenía. Se giró y vio que estaba Mikel, le puso una cara que no podría explicar.- ¿Qué haces tú aquí? -dijo la señora que tenía mucha fuerza en los brazos.
Mikel se cayó, no dijo nada, y salió de la habitación, creo que se le estaban cayendo otra vez varias gotas por los ojos.
-Hija, ¿No recuerdas nada verdad? -dijo la señora
Ella me explico, que era mi madre, yo no sabía en quién confiar, Mikel me mintió, hace tres meses que termino nuestra relación, hace tres meses que me marche de casa, pero eso ya no importaba nada, seguía sin saber cómo hice para golpearme la cabeza, seguía sin saber quién era en realidad.
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Bueno este es el primer capítulo, si veo que la novela tiene un gran apoyó hoy subiré el segundo capítulo. Si no es así, subiré capítulo mañana.
Hasta luego maricarmenes, que tengáis un feliz día.
Twitter: @ikozarim26 @lumikephi
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UNA HISTORIA PARA RECORDARTE-ALBALIA
Hayran KurguEstoy perdida en un mundo que supuestamente conocía, pero por alguna razón que desconozco, olvide a todo el mundo que me rodea y te olvide a ti querida desconocida, pero mi instinto me dice que solo puedo confiar en ti. Una historia para recordarte...