(+18)
En cuanto llegamos al hotel Raúl va a lavarse las manos, yo me quedo esperando en la sala, veo las cosas de Isma y me preocupo, él podría llegar en cualquier momento y sería muy incómodo.
— Eh Raúl, ¿Qué pasa si viene Isma?
— No pasa nada, pero lo llamaré para que no venga.— Sí, sería mejor — le doy un corto beso en los labios y voy al baño a lavarme.
Cuando vuelvo lo abrazo por detrás y apoyo mi cabeza en su espalda, aspiro su aroma fuertemente, huele riquísimo, un perfume varonil.
— Venga hombre, hazme este favor— se ríe— Vale, vale— cuelga y se voltea— ¿Estás oliéndome?— me pregunta sonriendo.
— Pues si.
— Lo normal eh.
— Es muy n...
— Shh— pone un dedo en mis labios, luego toma mi rostro entre sus manos y une nuestros labios, me dejo llevar por las sensaciones que me causa y enredo mis dedos en su cabello.
— Isma...dice que no vendrá...hasta mañana— dice entre besos, eso es bueno, aunque no podría quedarme hasta mañana, es más, ya debería irme, pero no quiero.
Raúl desciende sus manos más abajo de mi cintura y me presiona, no puedo evitar soltar un gemido, segundos después empiezo a sentir una presión en mi vientre que va creciendo.
Sube una de sus manos al cierre de mi vestido, se queda quieto unos segundos, se separa pero mantiene unidas nuestras frentes, como pidiéndome permiso para seguir. O genial, seguro lo hice pensar que no podremos tener sexo un largo tiempo o pensare que sólo me quiere para eso, pero no, ya no pienso eso. Afirmo con la cabeza y vuelvo a unir nuestros labios, rápidamente baja el cierre de mi vestido, desliza los tirantes de mis hombros y deja caer el vestido, pongo mis brazos sobre sus hombros y enredo mis piernas en su cintura por lo cual puedo sentir más su erección.
Nos lleva a su habitación y me acuesta en la cama cuidadosamente, quita mi sujetador y mis bragas dejándome desnuda.
Me observa profundamente con deseo.
Llevo mis manos al borde de su sudadera para jalarla hacia arriba, con su ayuda logro sacarsela, hago lo mismo con su playera y después con su pantalón, dejándolo en boxers.
Se acomoda entre mis piernas y vuelve a besarme desesperadamente, abro mis labios para darle acceso a mi boca, se separa y empieza a darme besos húmedos en el cuello bajando lentamente, mientras yo acaricio su espalda, se detiene en mis pechos y empieza a masajearlos mientras que con su boca los chupada y mordía.
Gemí por lo bajo y al parecer a el le gusto, sentí como una de sus manos iba bajando, quise cerrar mis piernas cuando sentí uno de sus dedos entrar en mi, comenzó a mover sus dedos dentro de mi vagina provocando más gemidos por parte mía.
Comienza a bajar besando mi abdomen y deteniendose en mi entrada, saca sus dedos y comienza a besar y jugar con su lengua en esa parte tan sensible, no podría estar más empapada, él sabe qué hacer exactamente para provocarme tanta excitación.
— Deliciosa, mía— susurra entrecortadamente.
Se levanta y se quita rápidamente sus boxers dejándome ver su gran miembro erecto, se pone un preservativo y vuelve a acomodarse entre mis piernas, suelto un gemido cuando siento su miembro en mi entrada, esto me va a doler y gustar, vuelvo a subir mis manos a su espalda y oculto mi cabeza en su cuello, siento como entra en mi de una sola estocada.
Clavé mis uñas en su espalda y mordí su hombro para contener un grito mientras Raúl gruñía mi nombre, empieza a moverse despacio, pongo mis piernas alrededor de su cintura y las apreto mientras besa y succiona mi cuello, empieza a acelerar el ritmo de sus embestidas, gemidos de puro placer salen de nuestras bocas, vuelvo a clavar mis uñas en su espalda cuando siento que llego a mi orgasmo y él al suyo.
Nos quedamos quietos unos segundos, luego sale de mi y se deshace del preservativo.
Se acuesta a mi lado y nos abrazamos, levanta mi barbilla y me da un corto beso, tiempo después nos quedamos dormidos.
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Consequences (AuronPlay)
Romance¿Estarías dispuesto a perder?¿A afrontar las consecuencias? Yo sí (por pendeja), ya nada me importa, sólo Raúl.